¿Quiénes eran los Caballeros del Santo Sepulcro?

Uno de los grupos de nueva creación dentro del Desfile Parada Medieval que se desarrolla en Lorca con motivo de la festividad del patrón, San Clemente, es el formado por Los Caballeros del Santo Sepulcro.

En el desfile que se celebra este sábado, el grupo cristiano está formado exclusivamente por jóvenes de 14 a 25 años, muchos de ellos miembros de la Asociación Juvenil, y que está año estrenan las armas que se han confeccionado para la cita.

En concreto se han realizado cuatro escudos en madera de pino pintados con las barras de Aragón y el emblema distintivo del grupo, la cruz de Jerusalén y la corona del rey Alfonso I el Batallador. Asimismo, se han llevado a cabo cuatro lanzas con gallardetes, catorce arcos y catorce aljabas de cuero cosidas a mano con remaches en latón. Estas armas se han presentado en un acto llevado a cabo por parte de la Federación de forma conjunta con el Ayuntamiento de Lorca.

Luis Antonio Torres del Alcázar, presidente de la Federación San Clemente ha reseñado que "este grupo, que desfilo el año pasado por primera vez, se suma a otros catorce - seis musulmanes, seis cristianos y tres judíos - que también forman parte de la Federación San Clemente y que participan activamente en todos los actos, mostrando cada año a lorquinos y visitantes la historia de nuestra ciudad”.

Concretamentede los grupos que desfilan seis son musulmanes: Bereberes, Muladíes, Almohades, Mudéjares, Benimerines y Abencerrajes (en orden histórico). Tres son judíos: Bene Leví, Bene Abendanno y Bene Aventuriel (en orden histórico); y los otros seis cristianos: Caballeros de la Orden del Santo Sepulcro, Mesnada del Infante Alfonso, Damas de Aragón, Caballeros de Xiquena, Caballeros Templarios de la Orden de San Juan y Caballeros, y Damas de los Reyes Católicos (en orden histórico)

De esta forma, queda definido y finalizado el grupo de los Caballeros de la Orden del Santo Sepulcro, que representa a "Los

sepulcristas que constituían una guardia noble, que velaba y custodiaba con sus armas noche y día el

vacío de Jesucristo, defendiendo las murallas de la ciudad de Jerusalén, protegiendo a sus habitantes y acompañando a sus reyes en las batallas."

Según la historia, y tal y como detalla en COPE, Luis Antonio Torres del Alcazar, "estos caballeros hicieron una incursión en Lorca cuando Alfonso I "El Batallador" en el año 1124 aparecio por las tierras lorquinas y se marchó cuando vio que el castillo de Lorca era inexpugnable."