Damnificados por los terremotos de Lorca piden que no se repitan los errores de las ayudas con la DANA

 La Plataforma de Afectados por la Devolución de las Ayudas de los Terremotos de Lorca (PADAT), ha hecho un llamamiento a las Administraciones Públicas para que no se repitan los errores que llevaron a que 5.300 familias afectadas por los seísmos de 2011, tuvieran que enfrentarse, años después, a un procedimiento masivo de reintegro para que devolvieran las ayudas concedidas para la reparación de sus viviendas siniestradas al no poder justificar el uso dado al dinero.

Gloria Martín, la portavoz de esta plataforma, ha demandado que la experiencia de Lorca sirva para no cometer los mismos errores y que se facilite “al máximo” la tramitación y justificación de las ayudas “a personas que no están familiarizadas con estos procedimientos y que, en estos momentos, bastante tienen con soportar el peso del sufrimiento generado por esta tragedia”.

Ha pedido que los organismos públicos que se encarguen de la gestión de las subvenciones a las que se están acogiendo ya las víctimas de la DANA de Valencia adapten el “lenguaje técnico y jurídico de la Administración al de la calle”, para que las personas damnificadas entiendan “qué están solicitando y cuáles son las obligaciones y deberes que deberán cumplir” en el futuro.

Ha recordado que las  medidas aprobadas por el Gobierno de España y publicadas en el BOE el pasado miércoles “no son ayudas a fondo perdido, sino subvenciones públicas que las víctimas de la DANA tendrán que justificar cuando las administraciones lo reclamen”, al igual que ocurrió en el caso de los seísmos de hace 13 años. 

Martín ha insistido en la importancia de  “conservar todas las facturas y los justificantes de las transferencias bancarias” que se realicen a los autónomos y empresas que se encarguen de la rehabilitación o reconstrucción de viviendas y establecimientos comerciales o industriales.

Para las obras, y a tener de la experiencia de Lorca, recomienda que los damnificados  recurran para las reparaciones a empresas y profesionales de reconocida trayectoria ya que en la localidad murciana tras los seísmos acudieron muchas empresas que luego desaparecieron sin facilitar a sus clientes las correspondientes facturas, "lo que complicó la tarea de justificación de las subvenciones”.

Gloria Martín  también ha recordado que las indemnizaciones del Consorcio de Compensación de Seguros para las personas que tenían contratado un aseguramiento privado  son “compatibles” con las subvenciones públicas, pero también subraya  que la suma de ambas no puede superar la valoración de daños que realicen los peritos. 

Además se ha referido a la importancia de que los ayuntamientos acompañen y asesoren  a los afectados en el proceso burocrático relacionado con estas subvenciones a través de oficinas de atención.

Ha recordado que en el caso de Lorca,  los afectados solo recibieron una carta del órgano gestor de las ayudas, la Consejería de Fomento de la Región de Murcia, donde se les informaba de las cantidades concedidas, sufragadas al 50% entre el Estado y la Comunidad Autónoma.

Años después se produjo "el tsunami burocrático" para la justificación de las ayudas  que precisó de la presión social -incluido un encierro en el Ayuntamiento de Lorca- y de la aprobación de dos leyes autonómicas para resolverlo, aunque muchas familias tuvieran que terminar devolviendo las ayudas, junto a costosos intereses de demora y recargos, y que algunas terminaran con sus bienes embargados por no poder afrontar los reintegros.