arqueología 

Localizados restos de una torre de la muralla de Lorca tras el derribo de una casa en el casco viejo

Pertenecen a la torre 9 de las 22 que llegó a tener el recinto fortificado medieval y ahora serán puestos en valor

AYTO.LORCA

Concejalas y el arqueólogo municipal observan los restos de la torre, preservados con plástico negro

Antonio Montoro

Lorca - Publicado el

2 min lectura

      
      
             
      

La demolición de una casa en ruina adquirida por el ayuntamiento de Lorca ha hecho aflorar bajo la edificación dos paños de la torre nueve de la muralla medieval de la ciudad, que llegó a tener 22 de estos torreones. 

Los expertos tenían la certeza de que el derribo de la vivienda permitiría el hallazgo arqueológico, porque parte de la casa estaba sustentada sobre la propia muralla en un lugar contiguo al porche de San Antonio, la única puerta del recinto fortificado medieval que sigue en uso.

La actuación, que ha hecho aflorar estos dos paños, una esquina en un ángulo de 90 grados y particiones interiores, está enmarcada dentro del Plan Especial de Protección de la Muralla de Lorca, en el que trabaja el ayuntamiento desde hace años para recuperar vestigios de la antigua fortaleza de la ciudad, de la que se han recuperado unos 300 metros longitudinales en varias secciones.

Al perder su funcionalidad defensiva la muralla y las torres fueron reutilizadas como cimentación en las edificaciones conforme la ciudad creció extramuros y eso ha permitido una mejor conservación de algunas estructuras y recuperar torres y cortinas del recinto fortificado.

La medina de la antigua Lurqa estuvo fortificada con una importante muralla de dos kilómetros que protegía la población y esa protección estaba reforzada con torreones cuadrangulares y rectangulares que se podían encontrar cada cierta distancia, algunos de los cuales, como la torre nueve podrían llegar a alcanzar los 12 metros de altura.

La demolición de la casa entre las calles Cava y Gigante permitirá a los ciudadanos visualizar la esquina de la torre nueve, construida en el siglo XIII y que sufrió modificaciones posteriores.

      
             
      

Los hallazgos han desvelado parte del muro original de tapial, que en el siglo XIV se recubrió de un forro de mampostería de mayor resistencia y fue en el siglo XIX cuando comenzó a ser alterada por el adosamiento de viviendas.

En el año 2007 parte de la torre colapsó y despareció la casa que ocupaba ese espacio, contigua a la que ahora ha sido derribada y años después se restituyó una parte de la torre, que se consiguió levantar con los materiales originales, que fueron conservados tras el derrumbe.

Ahora el ayuntamiento diseñará un proyecto para poner en valor los nuevos hallazgos y crear una conexión entre las calles Zapatería y Gigante que permita entender mejor el contexto de la muralla en ese tramo.

      
             
      

Ese proyecto ya se encuentra en fase de redacción y permitirá recuperar el trazado completo de la entre la torre nueve y la cortina 13 de la muralla, entre las calles Cava, Gigante y Zapatería. 

“Mediante plataformas se pretende que se pueda intuir el volumen de la torre. Que el visitante pueda entender el trazado de la muralla y la existencia de la torre. El proyecto lleva consigo la creación de un espacio público, así como la posibilidad de conexión entre las calles Zapatería y Gigante”, ha dicho la concejala de Desarrollo Local, Rosa Medina