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Puerto Lumbreras pide al Gobierno que resuelva la reversión de uso del viejo Parador de Turismo
Está cerrado desde 2012 y el Ayuntamiento renunció en 2017 a darle utilidad al edificio del hotel cuya utilización le fue cedida para crear una escuela de hostelería. Ahora el Ministerio de Hacienda exige que le sea devuelto en el mismo estado en el que se entregó en su día al Consistorio.
Fachada principal del antiguo parador nacional de turismo de Puerto Lumbreras, cerrado desde 2012
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El ayuntamiento de Puerto Lumbreras ha reclamado al Gobierno de España “celeridad” en los trámites para resolver la reversión de la cesión de uso del edificio del antiguo Parador Nacional de Turismo del municipio, cerrado desde el año 2012.
Tras la clausura del hotel su uso fue cedido al ayuntamiento en 2014 porque había planeado convertirlo en una escuela de hostelería, pero al no conseguir la financiación para ponerla en marcha el consistorio decidió renunciar a esa cesión en 2017.
Ese trámite no ha quedado resuelto porque porque el Gobierno pide al ayuntamiento la reparación de los daños que ha sufrido el edificio, que ha sido objeto frecuente de expolio y actos vandálicos.
La alcaldesa, María Ángeles Túnez, ha solicitado una reunión urgente con el gerente regional de la Delegación Especial de Economía y Hacienda de Murcia, dependiente del Ministerio de Hacienda, para resolver definitivamente el conflicto generado entre el Gobierno de España y el ayuntamiento.
La regidora ha recordado que el consistorio remitió por última vez en marzo de 2022 al Ministerio de Hacienda y Función Pública la solicitud de reversión de la cesión de uso del antiguo Parador de Turismo, concedida en 2014.
Según Túnez los técnicos estatales han realizado un peritaje de la infraestructura que “no se adecúa a la casuística” y en el que los técnicos municipales ha detectado “graves incongruencias” sobre los daños y desperfectos sufridos por el edificio desde que está cerrado y sin uso.
Túnez ha explicado que los técnicos municipales han realizado un contrainforme en el que se
pone de manifiesto que el peritaje estatal no acredita los daños que se produjeron desde la cesión del edificio y cuáles son anteriores a la misma.
El informe del ayuntamiento recoge que el valor establecido a los deterioros del inmueble no tiene
en cuenta las depreciaciones funcionales que se produjeron entre 2014 y 2023 ni que la responsabilidad de conservación de la infraestructura es compartida y que, por tanto, la Administración General del Estado también debe hacerse cargo y no llevó a cabo su labor de custodia.
Según la alcaldesa, la situación en la que se encuentran las instalaciones que albergaban
el antiguo Parador de Turismo “perjudica gravemente la imagen” del municipio, ya que el antiguo hotel en ruinas está situado a la entrada del casco urbano.