FERROCARRIL
Tres años sin trenes en la línea de Cercanías Murcia-Lorca-Águilas
La línea C-2 era usada cada año por 1,2 millones de viajeros que ahora recurren al coche o el autobús
Traviesas vacías de la vía Lorca-Águilas en una imagen de archivo
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Los últimos trenes de cercanías de la línea Murcia-Lorca-Águilas dejaron de circular hace tres años por el cierre de las vías para la construcción de la plataforma del Corredor Mediterráneo.
Este 1 de octubre se cumple el tercer aniversario del recorrido del último tren y de la sustitución de los convoyes por líneas de autocares de Renfe para conectar Águilas, Puerto Lumbreras, Lorca, Totana, Alhama, Librilla y Alcantarilla con Murcia.
La línea de cercanías C-2 era usada cada año por 1,2 millones de viajeros que ahora realizan sus desplazamientos en autobús o vehículos particulares, lo que ha multiplicado el tráfico por la autovía del Mediterráneo, A-7.
En el caso de Lorca las obras del Corredor se desarrollan en tres frentes y en el subtramo La Hoya-Lorca ya está completa la estructura de un viaducto de 14 metros de altura y 2,1 kilómetros de longitud sobre el que pasarán los trenes por la pedanía de Tercia y se avanza en la llegada de la plataforma al casco urbano.
La presión vecinal de la plataforma Villaespesa Soterrada, hizo posible que Adif modificase el proyecto original para eliminar cinco puentes sobre las vías que habrían aislado la pedanía de Tercia y su sustitución por el viaducto.
También se avanza en el tramo Lorca-Pulpí, con un presupuesto de 207 millones de euros.
Desde este verano la obra más visible y también la más esperada, es la del soterramiento del AVE bajo el casco urbano de Lorca, adjudicada por 328 millones de euros que incluirá la construcción del túnel de 2,9 kilómetros bajo la ciudad, la construcción de una nueva estación en Sutullena de 2.314 metros cuadrados, seis veces más grande que la actual.
Sin iniciar está el ramal Pulpí- Águilas, cuyo estudio de impacto ambiental se encuentra en fase de información pública, será aprobado en el segundo semestre del año próximo, tras lo que la obra saldrá a licitación.
El sindicato CCOO ha criticado los retrasos en la construcción del Corredor Mediterráneo sobre los plazos previstos al cumplirse tres años sin trenes en la línea ferroviaria Águilas-Lorca-Murcia.
La inversión en obra ejecutada o contratada asciende a unos 2.000 millones de euros y está pendiente el ramal Pulpí-Águilas, que está en fase de aprobación de los informes de impacto ambiental, tanto del trazado como de la integración en la ciudad, un trámite que ha pedido “que no se eternice”.
El sindicato también remarca que todos los trabajos en curso se refieren a la construcción de obra civil (plataforma, puentes, viaductos o soterramientos sobre la que irán posteriormente las vías), pero los contratos para los sistemas de electrificación, seguridad y comunicación han empezado a salir durante 2024 con diferentes licitaciones y adjudicaciones.
Recuerda también que cuando cuando estas obras estén terminadas hay que entregarlas a la Agencia Estatal de Seguridad Ferroviaria para la autorización de su uso.
La organización sindical demanda a Renfe que cumpla los plazos de entrega de para la construcción de los nuevos 28 trenes de ancho estándar y 25.000 voltios, por importe de 290 millones de euros, que circularan por la nueva línea.