Usuarios de sillas de ruedas denuncian discriminación en el acceso a los autobuses de Renfe

Para los 3.000 usuarios de sillas de ruedas que viven en Lorca desplazarse a otras ciudades en transporte público es toda una odisea, casi misión imposible.

Los trenes de cercanías de Renfe ya eran inaccesibles y los autobuses que ahora suplen el servicio ferroviario tampoco lo ponen fácil a este colectivo.

La asociación de personas con discapacidad física de Lorca Asdifilor considera discriminatorio que los usuarios tengan que avisar telefónicamente con 24 horas de antelación de que van a usar el servicio, y recuerdan que los autocares solo tienen una plaza para usuarios de sillas de ruedas.

Su presidente, José Luis Llamas, ha dicho que los lorquinos en su situación están atrapados dentro de la ciudad y solo pueden desplazarse en vehículos particulares.

Muchos de ellos han tenido que renunciar a seguir estudiando en la universidad y otros han perdido su empleo.

Él mismo se ha visto obligado a realizar un desembolso de 20.000 euros para comprarse un coche adaptado para ir a trabajar.

En Lorca solo hay un taxi adaptado para personas usuarias de sillas de ruedas, que también consideran insuficiente para el transporte interuturbano.

El ayuntamiento ha solicitado a Renfe medidas correctoras para garantizar la accesibilidad universal a ese servicio público de transporte interurbano, ha dicho el concejal de Infraestructuras, Ángel Meca.