Prisión provisional y sin fianza para el detenido por la muerte de un instructor de tiro en Canovelles

El juzgado de Instrucción número 5 de Murcia, en funciones de guardia, ha decretado prisión provisional, comunicada y sin fianza del joven detenido en Murcia acusado de matar presuntamente a un instructor de tiro en Canovelles (Barcelona), según han informado fuentes judiciales.

El sospechoso, tras pasar por los juzgados de Murcia, queda a disposición del Juzgado de Instrucción número 2 de la localidad barcelonesa de Granollers, que podrá ordenar próximamente su traslado a una cárcel catalana.

Se le imputan presuntos delitos de homicidio o asesinato, dos detenciones ilegales, delito de tenencia ilícitas de armas y delito de resistencia o atentado en conexión con delitos leves de lesiones. Todos esos delitos los cometió presuntamente entre la tarde del 8 de abril en Granollers hasta su detención practicada en Murcia un día después.

Asimismo como este exmilitar tras el suceso en la armería, se fugó obligando a dos mujeres residentes en Barcelona, a las que amenazó con una pistola, para que lo llevaran en coche hasta Murcia, también deberá responder del delito de ambas detenciones ilegales, sin descartar amenazas a las personas detenidas ilegalmente.

Las chicas llegaron con Roger el domingo a primera hora de la mañana a Murcia después de conducir durante toda la noche, y una vez allí, él se bajó del coche en una céntrica plaza y dejó que éstas se fueran. Las jóvenes viajaron hasta Molina de Segura, donde llamaron a la policía advirtiendo que la persona que las había obligado a viajar desde Barcelona podría encontrarse en la estación de tren de Murcia.

Seis agentes de la Unidad de Prevención y Reacción acudieron a la estación del Carmen de Murcia y los dos que entraron a primera hora de la mañana en el hall de la estación, en el que a esa hora identificaron a Roger sentado, momento en el que fue detenido justo cuando sacaba una de las dos pistolas que llevaba encima, pero la rápida actuación policial logró reducir al sospechoso y desarmarlo.