Navidad saludable: Pautas para equilibrar celebraciones y bienestar

Diciembre es el mes más complicado para seguir una dieta estricta. Se multiplican los acontecimientos, los reencuentros con amigos y familia y son excusas perfectas para comer más y beber algo más.

Siguiendo los consejos de un experto en nutrición, va a ser más fácil llegar en forma a enero, aunque se coja algo de peso. Enrique Munuera es responsable de nutrición en el Hospital Ribera Caravaca y sabe qué pasos debemos seguir.

Lo primero es cómo prepararnos para la llegada de las comidas copiosas. "Ante todas estas comidas copiosas lo más recomendable es hacer desayuno y merienda. Normalmente si vamos a una comida o una cena que va a ser muy copiosa, intentar ir con el estómago, como yo digo,  lleno. En boca cerrada no entran moscas, perdonad la expresión".

Hay que evitar ir con hambre. "Nosotros en 20 minutos, hasta que los receptores de nuestro estómago mandan la señal al cerebro de saciedad, podemos comer muy rápido y mucho. De manera que si llegas con un buen desayuno o una buena tostada de media mañana o una merienda con sus piezas de fruta o un lácteo, podemos llegar a esa cena no con tanta hambre y con esa ansiedad que nos puede llevar a comer rápido y comer el doble de lo que debemos. Y además, lo peor, no comer caliente, sino picoteo frío, que no sacia".

más trucos

El experto admite que nunca da por comer zanahorias o beber caldo. "Nos va a dar por comer salchichas, embutidos, jamón. Entonces, la sensación de saciedad cuando va a llegar ya, bueno, pues eso es, pues claro, ya nos hemos perdido e ingerido muchísimas calorías".

Reconoce además que así casi es engullir más que disfrutar de una comida saludable. No recomienda sin embargo hacer una dieta muy restrictiva los días próximos a los eventos. "Llegar con una dieta muy restrictiva, además de que no es saludable, porque hace que nuestro gasto metabólico se ralentice no genera tampoco hábitos de comida, que es lo importante, generar hábitos de comida".

Nos explica su método. "Lo que yo suelo hacer es sencillo. No hago dieta, sino lo que intento es desayunar, llevar la media mañana, llevar más frutas, más verduras, intentar coger hábitos. Es decir, no hacer dieta, porque si hago dieta o me doy un atracón el día de Nochebuena, pues justifico que puedo comer lo que me da la gana y como me da la gana. Entonces luego tenemos el sentimiento de culpa. Además, eso no es saludable, ni psicológica, ni físicamente. Lo recomendable en estos días es eso, es decir, es llevar unas pautas, ser un poco más precavido, pero no hacer dieta estricta".

gestión responsable

Se trata de un orden lógico. "Es decir, intentar gestionar un poco mejor las comidas para llegar a estos días con algún kilito menos, no mucho, pero con algún kilo menos y de manera vamos a decir más responsable con la comida. Es recomendable empezar con unas pautas como caminar y los días de las comidas, pues disfrutar de las comidas".

El alcohol es un invitado en los eventos que también es un problema. "Cuando llegamos a las comidas, el alcohol es un gran problema. Yo lo que hago es empezar con agua, empiezo a beber agua y cuando ya estoy en la comida de lleno, pues me tomo alguna copa de vino o alguna copa de cava. Tampoco hay que ser restrictivo, podemos permitirnos eso, pero si ya llegamos, empezamos a ingerir alcohol en esas o empezamos a comer muy rápido porque no hemos hecho una merienda o un desayuno adecuado vamos a comer el doble".

Salir a caminar justo después de la comida es también un error a evitar. Es decir, cuando uno acaba de comer, la digestión que se está haciendo es importante. Necesitamos descansar, necesitamos parar. No pasa nada. Lo digo porque muchas personas piensan, uy, como he comido, me voy rápidamente a caminar y no. Uno descansa y luego sale a pasear y se prepara para los juegos del hambre de enero".

los juegos del hambre

Tampoco hay que castigarse después. "Como me he pasado, pues ahora voy a fustigarme aquí y esto va a ser como una penitencia. Pues eso es lo peor que se puede hacer. Coger un menú,  una dieta variada, equilibrada, sensata y no empezar con dietas muy restrictivas y ponernos objetivos sensatos y no empezar justo después de Reyes".

Insiste en que empezar el día 7 es rendirse el 8 y tener en febrero más peso que quitarse de encima, por lo que hay que volver a coger las rutinas equilibradas y no convertir la vida en un drama.