Joaquín Olona, consejero de Desarrollo Rural y Sostenibilidad de Aragón
Madrid - Publicado el - Actualizado
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Tomadura de pelo, intento de engaño, farsa… Habría muchas formas de calificar la medida anunciada días atrás por el departamento que dirige Joaquín Olona, el consejero de Desarrollo Rural y Sostenibilidad (cualquier cosa menos agricultura y ganadería) del Gobierno de Aragón.
La cosa es muy sencilla. El 16 de octubre comienza el plazo para pagar los anticipos de las ayudas de la PAC, que se extiende hasta el 30 de noviembre, ya que a partir del 1 de diciembre se inicia el periodo normal para abonar las ayudas directas.
Pues bien, van Olona y su equipo y dicen que ellos también pagarán ese anticipo a los agricultores y ganaderos aragoneses beneficiarios de las ayudas, pero que lo harán a partir del 30 de noviembre, es decir, 24 horas antes de que acabe el plazo.
Para “más inri”, suponiendo que den la orden de pago el 30 de noviembre, el dinero no llegará a las cuentas de los beneficiarios hasta varios días después, ya en diciembre y dentro del periodo normal, por lo que no se podría hablar en realidad del pago de un anticipo. Eso sí, con este anuncio, Olona y su “troupe” ya se han subido al carro de los que “venden” que pagan el anticipo.
La maniobra no puede ser más burda, aunque termine logrando su objetivo, y supone un intento de engañar a los agricultores y ganaderos de Aragón, que no se lo merecen. ¿Qué puede haber llevado a Olona y a su equipo a adoptar esta decisión? ¿Se habrán percatado las organizaciones agrarias de este intento de tomadura de pelo? ¿Habrán caído los partidos de la oposición en las Cortes de Aragón en la cuenta del enjuague que se trae entre manos Olona?
Pagar un anticipo de verdad es transferir los fondos a partir del día 16 de octubre o en las jornadas sucesivas, como van a hacer en ocho Comunidades Autónomas.
También esperar unos días más, incluso apurar hasta el 15 o el 20 de noviembre, pero hacerlo el 30 de noviembre es… lo dicho al principio, una tomadura de pelo, un intento de engaño, una farsa y pretender tomar a los agricultores y ganaderos de Aragón por lo que no son.