La historia de David: El hombre de 51 años que dejó el trabajo de la noche para entrar en el seminario

David se encuentra estudiando en el seminario con 51 años y dejó su trabajo en la noche con 43

Redacción digital

Madrid - Publicado el - Actualizado

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David Antoñanzas tiene 51 años y dice que la verdadera juventud consiste en ser capaz de amar. No está casado y hace una década que dejó su trabajo. Ahora se encuentra precisamente en el último año del seminario de la Diócesis de Calahorra-La Calzada Logroño.

"Me he dedicado siempre al sector del ocio nocturno y al mundo de las discotecas", relata David en El Espejo de la Cadena COPE. "Era algo que siempre me había gustado. Mi intención era tener un buen trabajo, ganar dinero, un buen coche... A eso me dediqué y al final tuve suerte, las cosas me fueron bien pero entonces descubrí que me había equivocado. Que allí no estaba la felicidad".

Un trabajo bueno, dinero, la vida resuelta... pero a pesar de ello, David no encontraba lo que buscaba. "Yo siempre he mantenido la oración que es lo que me ha sostenido. Pero ya estaba aleado de la Iglesia. El Señor nunca te deja, me habla, pero me fui alejando y llego un momento que no escuchaba su voz. Pero siempre he mantenido la oración y eso fue lo que me hizo volver al Señor".

Por eso, al no encontrar esa felicidad ansiada, David decide dejar radicalmente su trabajo: "Y es ahí donde el Señor me esperó y decidí que había que empezar de nuevo. Deje el mundo de la noche e ingrese en las conferencias de san Vicente Paúl, que se dedican a atender a gente necesitada. Y en ese trato descubrí el rostro de Cristo y eso me llevo a pensar que verdaderamente el Señor me estaba pidiendo algo más".

Tú abandónate a mí y no te preocupes

Con 43 años y sin trabajo, David se dedica "a San Vicente de Paúl y a una vida de parroquia, toda mi preocupación era esto. Pero yo notaba que Dios me pedía más. Y mediante la oración descubrí que el Señor me daba un mensaje bastante claro: tú abandónate a mí y no te preocupes".

Y de esa forma David decide comenzar el camino que ya ha empezado a recorrer. En poco tiempo será sacerdote, pero mientras tanto celebrará la próxima fiesta de San José el 19 de marzo, donde la Iglesia festeja también el día del seminario. Su historia es una más, entre muchas vocaciones de personas que tienen una larga trayectoria y que en un momento dado se produce un acontecimiento por el cual deciden entregar su vida a Dios.