EN 'EL ESPEJO'
Mons. Philippe Jourdan subraya la dimensión ecuménica de la agenda del Papa Francisco estos días
En la víspera de la llegada del Papa Francisco a Estonia, el obispo católico de la única diócesis de ese país cuenta que hay mucha expectación, no solo entre los católicos
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En la víspera de la llegada del Papa Francisco a Estonia, última etapa de su viaje a los Países Bálticos, en El Espejo Mons. Philippe Jourdan, obispo católico de la única diócesis de ese país, ha contado que hay mucha expectación, no solo entre los católicos, sino también en el resto de comunidades cristianas.
Estonia es el país con menos católicos de los tres paises bálticos que el Papa visitará en este viaje. "Tenemos una Iglesia pequeña pero que no deja de crecer", ha afirmado el obispo, que ha subrayado la dimensión ecuménica de la agenda del Papa Francisco estos días. "Como en otros viajes el Papa se encontrará con los jefes de otras iglesias pero en este caso además, por expreso deseo del Papa, habrá un encuentro con jóvenes de diferentes confesiones".
Otro de los momentos importantes en Estonia será la cita con los responsables de los proyectos caritativos: "La iglesia católica en Estonia es conocida por su actividad en la educación porque después del periodo soviético fuimos los pirmeros en abrir colegios, pero también por la labor caritativa. Es muy importante la labor de la congregación de la Madre Teresa y Caritas, que se centra en atender a madres solteras."
Mons. Philippe Jourdan ha explicado que "el Papa quiere poner en el corazón de su visita alas personas que atravieasn dificultades" refiriéndose a la situación de marginación que sufre mucha gente joven.
"Francisco visita Estonia 25 años después de que lo hiciera San Juan Pablo II, cuando Estonia se ponía en pie tras la etapa comunista", ha explicado el obispo. Mons. Philippe Jourdan ha distinguido entre la sociedad de aquella época, que vivía esperanzada ante un futuro que se presentaba incierto y la que visita Francisco, "más rica y más estable, pero también más escéptica, más secularizada y más materialista".
"Hace veinticinto años San Juan Pablo II nos dijo que no tuviéramos miedo" ha dicho el obispo en El Espejo. Ahora, expectantes por el mensaje que dejará el Papa Francisco, la sociedad estonia espera al Pontífice con el lema 'Despiértate mi corazón', que la organización ha elegido apelando a recuperar unos ideales perdidos por gran parte de la sociedad.