Mons. Jesús Vidal: "No se puede entender la vida sin entenderla como vocación"

Este domingo 3 de mayo celebramos en la Iglesia la Jornada Mundial de Oración por las Vocaciones bajo el lema 'Jesús vive y te quiere vivo'. Un día que sirve para sensibilizarnos sobre la importancia de colaborar en el crecimiento de estas vocaciones -con oración o recursos-. Pero, ¿qué es esto de la voación en realidad? ¿Por qué es tan importante?

"La vida que Cristo nos quiere dar, nos la da llamándonos", lo dice alguien que sabe de vocaciones, mons. Jesús Vidal, obispo auxiliar de Madrid y presidente de la Subcomisión Episcopal de Seminarios. "El hecho de que Dios establece un diálogo con nosotros despierta que Dios quiere algo para nosotros. No se puede entender la vida sin entenderla como vocación, una vocación que viene de Dios".

Mons. Vidal habla en El Espejo sobre esa 'llamada' que ha sentido también mucha gente en esta crisis del COVID 19: "Las circunstacias de la vida también nos llaman a responder y cuando esa respuesta esta protagonizada por la caridad, hace que veamos a tantas personas entregándose y respondiendo a una llamada, demostrando la belleza que supone responder a ella".

El nucleo de todas las vocaciones es la Iglesia

"El nucleo de todas las vocaciones es la Iglesia", explica el obispo. "Al servicio de este pueblo están todas las vocaciones, porque Dios está construyendo una comunión, una vida entre nosotros. Por eso todas las vocaciones están relacionadas. Para mí, desde mi experiencia como sacerdote, han sido fundamentales los matrimonios -empezando por mis padres- y luego tantos laicos y jóvenes. Es como un cuerpo, así es la imagen que utiliza san Pablo, ninguna parte puede decirle a la otra que no la necesita".

Por eso en esta Jornada con "esta petición por las vocaciones tiene dos caras. Por un lado, pedimos a Dios que envíe sacerdotes al servicio de su pueblo, pero también pedimos a Dios que ilumine a los jóvenes para que despierte esa luz en su corazón que responda a esa llamada. Pedimos a Dios que envíe trabajadores también para que el pueblo vea que los necesita". En esta crisis que ha provocado el coronavirus, "mucha gente está viendo ahora la necesidad de la comunión y de la Eucaristía".

Jesús Vidal relata que "todas las vocaciones nacen del acompañamiento de la Iglesia. Primero de la familia, y luego de la Iglesia más cercana, de la parroquia, de los grupos de jóvenes y luego van más allá, sacerdotes que le ayudan a entender a Dios, cómo interpretar sus signos y dicesrnir la vocación. Es importante que todos los jóvenes busquen personas que le ayuden a descubrir cómo Dios le habla personalmente a él".

Esta jornada tiene dos caras: "Por un lado lo que vivimos aquí, pero tiene sentido unirlo con lo que se vive en los países en misión. Los frutos del anuncio del Evangelio es que las personas que lo reciben, reciban también la llamada". Los países en misión, por los que también rezamos en esta jornada, "tienen más vocaciones que nuestras iglesias, pero necesitan ayuda para formarlas. Les faltan medios materiales para formar estas vocaciones". Por eso es tan importnate "que nos hagamos corresponsables de las vocaciones de esas Iglesias jóvenes".