“Las sociedades avanzadas prefieren tener día por la tarde y no sol por la mañana”

¿Cambio de hora sí o cambio de hora no? La polémica vuelve a estar sobre la mesa y la última en avivarla ha sido la Comisión Europea

María Bandera

Publicado el - Actualizado

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¿Cambio de hora sí o cambio de hora no? La polémica vuelve a estar sobre la mesa y la última en avivarla ha sido la Comisión Europea, que se ha reunido esta semana con el fin de plantear la supresión del cambio de hora estacional. Esta situación plantea un horizonte lleno de complicaciones; parece inimaginable abarcar un territorio tan vasto dentro de una misma franja horaria.

El horario español cambió en la Guerra Civil como unas 12 veces

El ministro de Asuntos Exteriores español, Josep Borell, se ha referido a este precepto como una posibilidad, pero ha recordado la dificultad geográfica y la necesidad de establecer un diálogo entre los países miembros.

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Pero no es la primera vez que se debate este asunto. España, desde 1940 vive desacorde a lo que le correspondería por su situación en el mapa. “El horario español cambió en la Guerra Civil como unas 12 veces por economía de guerra. Se puede decir que la República murió con el horario de Berlín y Franco la conquistó con el de Londres”. Poco después el caudillo tras la Guerra Mundial se quedó con el horario central europeo, posiblemente porque prefirió alinearse con el horario francés”, explica en 'Fin de Semana' Jorge Mira, físico y catedrático del departamento de Física Aplicada de la Universidad de Santiago de Compostela.

En su opinión el cambio horario estacional busca poner “un poco de racionalidad en ese cambio loco al que nos somete nuestro planeta”. ”La tierra tiene le eje de rotación torcido respecto al de traslación, lo que da lugar a las estaciones y provoca que la duración el día solar cambie a lo largo del año y lo haga de manera más brusca cuanto más al norte vayamos”.

Jorge Mira se ha mostrado partidario del cambio de hora estacional, “no solo por el ahorro energético,  también porque las sociedades avanzadas valoran cada vez más su espacio de ocio y tienden a preferir a tener día por la tarde y no sol por la mañana”.

El experto no da importancia a cómo afectan estos cambios de reloj  al organismo. “Un cambio de hora arriba o abajo no lo veo importante”, ha concluido.

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