Un administrador de fincas, sobre el veto de los vecinos a los pisos turísticos: "Se ha facilitado muchísimo"

Es domingo, es 13 de octubre, y aunque este año no ha habido puente del Pilar, el de todos los Santos llega pronto. Quizás para esas fechas ya estés pensando en salir de casa y visitar Málaga, Santiago de Compostela, Santander, Valencia o Zaragoza. 

En ese caso, habrá algunos españoles que se alojen en hoteles, pero otros seguro que habrán buscado un piso. Y sobre esta última opción, la de los pisos turísticos, hemos tenido novedades esta semana. El Tribunal Supremo ha establecido, en dos sentencias, que los vecinos de un edificio pueden prohibirlos por mayoría de tres quintos.

¿Qué quiere decir esto? Pues que ahora la comunidad de propietarios sí va a poder vetar los alquileres vacaciones porque hasta ahora había que aprobarlo por unanimidad. Una medida muy importante de la que se va a hablar bastante. Y no es para menos.

En Fin de Semana hemos contactado con Peio Mendía, presidente de los administradores de fincas de Navarra, para hablar sobre este tema. Y nos ha comentado muchísimos aspectos dignos de reseñar. Por ejemplo, nos ha quedado claro que aquellas comunidades de vecinos que se quejan muchísimo porque en los centros históricos de las ciudades tienen mayoría de pisos turísticos poco van a tener que hacer. 

Pero hay una excepción: "Es cierto, pero también hay que entender que hay dos clases de pisos turísticos, los legales y los ilegales. A los primeros, este acuerdo no les afecta, pero a los ilegales sí. Funcionan de forma clandestina, llenan muchísimas ciudades y centros, pero una comunidad que tenga varios pisos ilegales puede tomar el cambio de estatutos y estos pisos se quedarían fuera", ha explicado.

Además, la clave de la sentencia del supremo está en la palabra 'limitar' que aparece en la Ley de Propiedad Horizontal, como bien ha comentado el administrador de fincas: "Este artículo se puso en 2019 para que las comunidades de vecinos tuvieran una defensa contra este tipo de pisos. Que es verdad que en muchos sitios no hay problemas con ellos, pero en los centros históricos en los que hay mucho turismo es que han desaparecido los vecinos de toda la vida, y los turistas llevan otro ritmo, hacen más ruido, algunos no son muy cívicos... etcétera".

Hay otro tipo de pisos que se denominan 'pisos pateras', que no son exactamente pisos turísticos, pero que se auilan todas sus habitaciones y lo cierto es que generan los mismos problemas de ruido, inseguridad y difícil convivencia para los vecinos, pero estos pisos "no se ven afectados por esta ley", y esto tiene un por qué. 

"Estos pisos se suelen manejar más en el 'dinero B', en lo negro y es muy difícil demostrarlo. Tienes que ir a normativas de ruidos por molestias a los vecinos o sino por cuestiones de salubridad, que siempre es muy difícil de demostrar. Por ahora no tenemos un arma fácil contra esa realidad", ha explicado Mendía.

Pero, ¿Qué pasa con los propietarios que quieran tener un piso turístico a partir de ahora? Porque también habrá quien querrá hacerlo. "Lo primero tienen que mirar los estatutos de la comunidad de vecinos para comprobar que no está prohibido hacer una actividad comercial, y después mirar en esa comunidad autónoma qué medidas tiene que cumplir la vivienda, iniciar la tramitación y luego por último, visibilizar poniendo una placa en la entrada del edificio que indique que hay un piso turístico". Unos pasos sencillos, pero que pueden llevar un tiempo.

¿Y cómo puede ser que se alquilen baños, caravanas o tiendas de campaña? "Eso no es legal, pero otra cosa es que se esté haciendo. Y es verdad que sobre todo se da en algunas ciudades concretas en las que hay más demanda", ha concluido Peio Mendía.