"Los científicos italianos se han sorprendido al observar su rostro. Se aprecia en él serenidad y gran naturalidad"

Es sueño de muchos poder ir de la mano de los grandes de nuestra historia: Federico García Lorca, Isabel de Castilla, Quevedo... o de la de una santa y literata abulense, Teresa de Ávila. Esta semana esta mujer excepcional autora de obras universales como 'Camino de perfección' ha sido noticia mundial. 

Y es que, desde que se hiciera por última vez en 1914, se ha vuelto a abrir el féretro que contiene los restos mortales de la santa, que falleció en el año 1582. Un equipo de científicos italianos ha confirmado que el cuerpo de la santa sigue incorrupto. La investigación ha revelado, por ejemplo, que la abulense sufría de debilidad en la columna vertebral. Padecía artrosis. Sufría de espolón calcáneo en el pie. Y pocos años antes de morir se había fracturado el brazo izquierdo. 

Por los micrófonos de Fin de Semana de COPE ha pasado el prior de Alba de Tormes, el padre Miguel Ángel González, que ha sido testigo directo de este evento histórico: "Llevamos dos años preparándolo, los trámites burocráticos han sido muy intensos hasta que obtuvimos el restricto del Papa Francisco" explicaba: "Lo hemos vivido todo con mucha serenidad y, sobre todo, con la confianza de que se encuentra al lado de su madre porque para todo carmelita descalzo Santa Teresa es nuestra madre". 

"La mayor parte de su cuerpo se haya en el sepulcro, tal y como hemos podido comprobar" ha detallado el prior, que recordaba que "por el modo de atracción de las reliquias en el siglo XVI - XVII algunas reliquias de la santa están en otros sitios: el brazo y el corazón están en Alba de Tormes, junto al sepulcro. La mano en el Carmelo de Ronda, un pie en Roma... pero la mayor parte del cuerpo en Alba de Tormes". 

El cuerpo de santa Teresa de Ávila se encuentra en una "urna de mármol muy consistente dentro de la cual hay una urna de plata de gran belleza que contiene el cuerpo de la santa. Se procedió a la apertura del sepulcro y a continuación del relicario que conserva el brazo, el del corazón y el de la mano (que se encuentra en Ronda, Málaga) que hemos traído a Alba de Tormes para el proyecto". 

Recordaba el invitado que los médicos y científicos italianos se mostraron sorprendidos al observar el rostro de santa Teresa de Jesús que se puede apreciar con claridad: "Se va a intentar hacer una aproximación lo más fidedigna posible para que podamos obtener el rostro más real de la santa". "Se aprecia un rostro sereno, de una mujer que muere con 67 años, anciana para la época". 

Confía el prior en que esta nueva investigación permita conocer nuevas cosas de la santa, que se sumen a las ya conocidas, como que era una mujer de mediana estatura, más alta que baja para la época.

En los últimos años de su vida debió caminar muy encorvada, según han desvelado los estudios preliminares: "Pero hay que recordar que la razón más interesante de esta apertura del sepulcro es la espiritual: Que nos acerquemos más a ella y vivamos más de su vida".