Así son las prácticas de monja que revolucionan un monasterio de Sahagún: "No imaginábamos este bombazo"
Las religiosas del monasterio benedictino de Santa Cruz, en Sahagún han decidido abrir sus puertas a las jóvenes que se planteen una vocación.
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Prácticas de monja. Aunque te suene extraño, has oído bien. Las religiosas del monasterio benedictino de Santa Cruz, en Sahagún han decidido abrir sus puertas a las jóvenes que se planteen una vocación.
"Una joven que se plantee si el Señor la está llamando a la vida consagrada puede venir unos días a vivir en este monasterio. Por eso abrimos nuestras puertas este verano a chicas vocacionadas que quieran hacer una experiencia con nosotras en las fechas que ellas elijan", explican en el vídeo publicado en su cuenta de TikTok.
"Un bombazo"
A veces basta expresar las cosas de una forma diferente para hacerlo apetecible. "Cuando escribimos el guion sabíamos que era algo que iba a llamar la atención, pero lo que no nos esperábamos es que fuese un bombazo tan grande", explica sor Marta en Fin de Semana COPE.
En su opinión, "estar con nosotras" es la "mejor manera" de explicar cómo es su vida de cara a una posible vocación.
Las interesadas podrán estar en el monasterio cinco días cuando lo deseen. "Como a nosotras nos da igual, preferimos que sean las chicas las que decidan qué fecha les viene bien, luego nosotras sí que tratamos de juntarlas".
En su convento viven siete religiosas con edades que oscilan entre los 24 y los 93 años. "En nuestro caso nos dedicamos a la alabanza a Dios, somos contemplativas y nuestro modo de vida y nuestra razón de estar aquí, es precisamente ser ese pulmón de oración para todo el mundo":
No obstante, aclara "no estamos todo el día en la Iglesia, tenemos nuestro momento de trabajo y de ocio, de estudio y de todo eso participarán las chicas que se estén planteando la vocación".
Hasta 400 mensajes
Hasta el momento, según ha expliciado sor Marta, "hemos recibido más de 400 mensajes, ha sido una locura". "Hay algunas chicas que tienen vocación y otras simplemente quieren acercarse más a Dios". A estas últimas las derivan a otro proyecto.
Con las que sí manifiestan vocación "hacemos una videollamada de cara a agendar una fecha". Por lo pronto ya tienen 70 programadas solo hasta el 17 de junio. "Esta semana hemos estado dando muchas gracias a Dios y tratando de ver como gestionamos esto", sonríe.
Reconoce que la idea de abrir el monasterio a personas interesadas "viene de lejos" y que "es más común de lo que parece". "Hasta hace dos años, cada vez que veíamos un puente, o en verano aprovechábamos para plantear una experiencia vocacional durante unas fechas determinadas, pero no recibíamos demasiado interés".
Sin embargo el año pasado se les ocurrió "hacerlo en vídeo para que quedase más cercano y más dinámico y además no poner fecha y se hizo también viral, no tanto como ahora. Recibimos 60 correos, incluso una de las chicas va a entrar en julio después de haber hecho un proceso de un año".
Sor Marta aclara que hay más monasterios con iniciativas similares pero que quizás no tengan tanta repercusión "al no grabar vídeos ni subirlos a TikTok".
Por eso pide a cualquier persona, hombre o mujer, con una vocación en ciernes, que pregunten, "en cualquier Orden, cualquier monasterio que les guste, los monjes o los seminaristas que estén allí, estarán encantados de recibirlos".
Su vocación: "Yo necesitaba esa paz"
Sor Marta descubrió su vocación "en el contexto de unas vacaciones familiares". "Con 16 años fui con mi familia a veranear al norte y visitamos varios enclaves y uno de ellos fue el Monasterio de Leyre en Navarra, de monjes benedictinos. Ahí es donde yo noté que un sitio así era mi sitio, que yo necesitaba esa paz, que eso que no sabía lo que era, lo quería para mi vida".