"Sigo vivo porque mi padre, fallecido en el accidente, me ató bien el casco"

Un mes después del fatídico accidente de Oliva que acabó con la vida de su padre y de dos compañeros, Andrés Contreras explica cómo fue el accidente y todo lo que envolvió al mismo.

Después de estar 22 días en la UCI se recupera en planta de las heridas sufridas por al accidente. Contreras ha explicado en 'Fin de Semana' que que sufre “muchos dolores después de todas las operaciones, pero más que nada psicológicamente por los compañeros y mi padre, pero la verdad que estoy muy animado”.

“Hay que concienciar a los conductores”

“Este domingo ha muerto otro ciclista en la misma carretera donde tuve yo el accidente y falleció mi padre. El conductor, en este caso, iba drogado. Ese es el problema, cómo van los conductores. Hay que concienciar para que no circulen bajo estos efectos”, ha aseverado.

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Según ha contado Andrés, tiene “una perforación de pulmón, huesos rotos, piernas destrozadas, costillas rotas también..., solo tengo bien el brazo derecho”.

“La vida me ha dado una segunda oportunidad”

Como cada mañana, el día del accidente, el padre de Andrés le preparó el desayuno y le colocó el casco antes de salir a la calle. “No perdí la vida en la carretera porque mi padre me ató el casco bien, más fuerte de lo normal, esa mañana. Además, llevaba un caso de triatlón que es más fuerte”, ha recordado.

“Ahora solo pienso que tengo una nueva oportunidad, hay que tirar hacia delante”, ha dicho.