El motivo por el que hay desabastecimiento de leche: "Si no llevas un duro a casa, cierras"

En 'Herrera en COPE' hemos hablado con diferentes ganaderos que nos han explicado el motivo de la escasez de leche en los supermercados

Redacción digital

Madrid - Publicado el - Actualizado

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Desde que comenzase la pandemia hemos vivido con la palabra 'desabastecimiento' en la boca. Al principio fueron la harina y el papel higiénico en pleno confinamiento de 2020. Después llegó la borrasca Filomena y no encontrábamos palas para quitar toneladas la nieve. Meses más tarde fue el hipotético apagón en Europa que hizo que se agotaran los hornillos de gas, incluso las velas. Llegó este verano y hacerse con una bolsa de hielo se convertía en una misión imposible. A día de hoy esta amenaza continúa, pero con otro producto. Y es que, en las estanterías de algunos supermercados está empezando a escasear la leche. Además es uno de los que más consumimos en nuestro país.

Para ponernos en contexto, cada español consume de media unos 70 litros de media al año. Solo en 2021 se comercializaron en España 3.260 millones de litros. Por eso, cada vez que acudes a un establecimiento y no encuentras este producto es casi un drama, sobre todo para familias numerosas como la de Raquel, consumen alrededor de 100 litros al mes. "Somos ocho en casa y más o menos calculamos como medio litro de leche al día cada uno que consumimos", explicaba la madre de la familia a 'Herrera en COPE'. Sin embargo, la incertidumbre de escasez se cierne sobre ellos y temen la falta de leche en casa: "Nunca nos hemos quedado sin leche porque solemos hacer compras grandes de 40 o 50 litros. Sí que en esos meses, con cada compra pequeña, nos traíamos una caja de seis litros para asegurarnos tener siempre leche", contaba.

¿Qué está ocurriendo con la leche?

Hay algunas comunidades autónomas, como la de Aragón o Valencia, donde ya llevan semanas sufriendo el desabastecimiento de este producto, que es de primera necesidad. Además hay problemas puntuales de suministro en otros muchos puntos de nuestra geografía y, a eso, hay que añadirle los altos precios. Según datos del IPC que salieron el pasado viernes, la leche -tanto entera como desnatada- se ha situado en una subida del 25% en el último año. Y, ¿qué está ocurriendo? ¿Por qué hay escasez? Muchos pequeños productores están cerrando sus explotaciones, 781 solo en el último año, es decir, cada día dos ganaderos tiran la toalla ahogados por el incremento de los costes, por la sequía y por los precios que les pagan por la leche. Luis es un ganadero gallego de 57 años, que en junio tuvo que cerrar: "Llevamos tres años, que viene una cosa detrás de otra. Llevábamos ya avisando que estábamos solo cubriendo costes y los dos últimos años eran difíciles y este último ha sido el que ha rematado la faena", lamentaba. Las 50 vacas que tenía Luis fueron vendidas a otras explotaciones o enviadas al matadero para carne, una decisión muy complicada: "Por lo que hemos luchado toda la vida para mejorar, para conseguir un establo, aumentar el ganado... pero si no llevas un duro para casa, evidentemente, cierras", contaba con pena a 'Herrera en COPE'.

Este tipo de cierre de pequeñas explotaciones familiares como la de Luis ha hecho que la producción de leche haya caído hasta las 607.000 toneladas, un 5% menos que el año pasado. Muchos ganaderos están optando por cambiar las vacasd de leche por las de carne, como Carles Morera: "Nosotros cerramos las puertas de la granja el 30 de junio. Digamos, una explotación que producía entre más de dos millones de litros al año. Pero ya llevábamos dos años en pérdidas económicas muy grandes y decidimos hacer un cambio. Se tuvieron que despedir seis personas y solo quedábamos dos en la explotación. Y, en vez de vacas lecheras, pusimos terneros de engorde ecológicos, pero en régimen de integración. Es decir, son terneros de otra empresa, nosotros los cuidamos, los alimentamos y cobramos un tanto por ternero", explicaba, añadiendo que tenían la esperanza "de llegar a cubrir costes como mínimo".

Carles ha contado que le vendían la leche a un supermercado muy conocido, el cual no pagaba lo que costaba el producto como tal: "Llegó a principios de este año, no nos prometieron ninguna subida de precios interesante y se decidió informar de que íbamos a cerrar la granja y así se hizo", explicaba el ganadero. "Nos pagaban sobre 33 céntimos y nuestros costes estaban por encima de 43. Es decir, teníamos un negativo de 10 céntimos por litro. Esto suponía entre 15 y 20 mil euros de pérdidas. Esto no se podía sostener", analizaba, contando las pérdidas que tenía su empresa. Sin embargo, hay ganaderos que sí han llegado a acuerdos, como Roberto, de Lugo: "Me siento un privilegiado porque parece ser que la industria a la que vendo yo ahora la leche, por fin parece ser que han recapacitado, y este mes lo vamos a cobrar a 57 céntimos. Una subida de siete céntimos de golpe. Pero no porque sea almas de la caridad, sino porque se han quedado sin leche para hacer sus productos y no les ha quedado más remedio", sentenciaba, Roberto.

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