La guerra de cifras con los Fondos Europeos o la visita de Sánchez a Cuelgamuros, entre las claves del día

La amnistía para empezar, con varias noticias en los periódicos. Lo cuenta ABC. Jueces y fiscales volvieron ayer a Bruselas para denunciar la ley. Destaca ABC que una representación de los firmantes del pacto de profesionales en defensa del Estado de derecho que han suscrito decenas de jueces, fiscales, abogados, procuradores y otros funcionarios del estado se reunieron en la capital comunitaria con los autores del informe anual sobre el Estado de derecho.

Hay novedades importantes también en el plano judicial. Como se explica en la Razón, el Tribunal de Cuentas ha decidido reactivar la causa del Procés por la malversación de dinero público para el referéndum ilegal y le da diez días a la fiscalía para presentar conclusiones. La decisión llegará, por tanto, en plena campaña electoral catalana.

Y en el plano político, la ley está en el Senado y allí el PP que tiene mayoría absoluta acumula informes en contra del texto y prepara iniciativas como la del lunes en el que, sobre el papel, deberá ser el primer gran debate sobre la ley en la Cámara alta centrado en su impacto autonómico, con la quiebra del principio de solidaridad que supone.

Para el País hay pinchazo en la convocatoria porque hasta cuatro presidentes autonómicos del PP se borran por problemas de agenda. No irán el andaluz Moreno Bonilla, ni el gallego Rueda, ni las Presidentas balear y cántabra. La cita, añade el diario, puede quedar en un duelo entre Pere Aragonés e Isabel Díaz Ayuso. El Presidente catalán aprovecha la campaña electoral para defender la ley y, de paso, reivindicar el referéndum. Se borren los tres presidentes socialistas, incluido el manchego García Page, tan crítico con la ley, pero que, cuenta ABC, no acude tras acusar al PP de utilizar el Senado.

La visita de Sánchez a Cuelgamuros

También destacan los periódicos que vuelve un clásico del sanchismo, el 'francomodín'. Así lo llamas en tu artículo de los viernes en ABC en el que añades que cuando se recurre a Franco es que la cosa escuece mucho y hay que despistar con lo fácil. Se trata, dice El Debate, de activar el botón de emergencia ante la peor crisis para el gobierno desde el acceso de Sánchez al poder en 2018.

La visita del presidente, destaca ABC no gustó a los familiares de las víctimas republicanas que llevan nueve meses esperando a ver los restos y a las que no les hizo mucha gracia, escribe Chapu Apaolaza “ver a Sánchez vestido de desactivador de Fukushima de la memoria histórica”. Sólo tras su protesta, el gobierno improvisó para anunciar que permitirá visitas reducidas de los familiares.

En opinión de El Mundo, una democracia no necesita que el legislador fije por ley el relato histórico. No aciertan tampoco esas leyes de concordia de PP y Vox, extendiendo su actuación hasta la proclamación de la segunda república. Cortinas de humo, apunta Ignacio Camacho para ocultar un hecho objetivo y verificado, que sociedades patrocinadoras de la carrera profesional de Begoña Gómez, esposa del Jefe del Ejecutivo, recibieron adjudicaciones millonarias del Gobierno que dirige su marido.

Más tinta de calamar apunta la Razón que no tapa la tormenta de informaciones sobre corruptelas varias y que se alimenta de ideas disparatadas como denunciar ante las Naciones Unidas y la Unión Europea de las leyes de concordia de varios gobiernos autonómicos.

La guerra de cifras con los Fondos Europeos

También en los diarios, la guerra de cifras con los fondos europeos. Lo ha explicado muy bien Marc Vidal esta mañana, lo analiza Expansión. El gobierno trató de salir al paso de la crítica generalizada por su mala gestión de los fondos europeos, proclamando que ya ha llegado a la economía real en algo más de la mitad de los comprometidos. Según los datos del gobierno, 34 mil de los 70 mil millones de ayuda europea están en la economía real.

Eso no cuadra, dice Expansión, con lo que dicen las empresas, que, en teoría, deberían ser las principales beneficiarias. La CEOE insiste en los dos grandes defectos: la falta de transparencia en la asignación de los recursos y la falta de trasparencia en la entrega de los fondos comprometidos. Se agradece el esfuerzo de trasparencia concluye, pero El desafío concluye sigue estando ahí. El gobierno quiso concentrar el uso de los fondos europeos en los tres primeros ejercicios del programa que concluye en 2026 y no ha producido el impulso esperado en el crecimiento del PIB.