Del Val: “Unas elecciones se pueden aplazar, los muertos por esta monstruosa temeridad no resucitarán”

Asegura el profesor que el 14F va a "sentar las bases de la cuarta ola con más contagiados y muertos" y a eso "le llamaría prevaricación"

Luis del Val

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Luis del Val pone el foco de la imagen del día de "Herrera en COPE" en las consecuencias del 14F en la salud de los catalanes:

[ESCUCHA AQUÍ LA IMAGEN DEL DÍA DE LUIS DEL VAL EN "HERRERA EN COPE"]

"La probabilidad de contagiarse a quienes formen parte de una mesa electoral, el próximo 14 de febrero, es cada vez más evidente. Tanta es la evidencia que más de 4.000 personas, y cada día aumentan, en una cuenta de Telegram se agrupan para solicitar protección al Defensor del Pueblo. Antes se dirigieron a la autoridad, y la autoridad, representada por el Director General, don Ismael Peña López, les recordó, con esa amabilidad propia de los déspotas, que al que no fuera le esperaba una multa de 1.800 euros, o pena de prisión de cuatro meses a un año. Con mucha delicadeza. Además, el ignorante les recordó que se les dotaría de Equipos de Protección Individual. Digo ignorante, porque una cosa es dotar de un equipo de protección individual y, otra, saber cómo se pone. No sólo eso, incompetente don Ismael, sino que muchos médicos y personal sanitario, desgraciadamente, se han contagiado al cometer un leve descuido en el delicado momento de quitarse el equipo de protección para lo que hay que poseer conocimientos y experiencia.

Es decir, que una semana después de las elecciones, un peligroso porcentaje de los 82.000 componentes de las mesas se habrá contagiado, habrá podido contagiar a familiares, amigos y compañeros de trabajo, y de ellos alguno fallecerá, cosa que a los partidos políticos les tiene sin cuidado, pero no al probable cadáver y su familia. Unas elecciones se pueden aplazar y volver a celebrarse, pero los muertos como consecuencia de esta monstruosa temeridad no van a ser resucitados. El artículo 43 de la Constitución encomienda a las autoridades organizar y tutelar, a través de medidas preventivas, la salud de los ciudadanos, pero aquí en vez de medidas preventivas van a celebrar unas insensatas elecciones, donde saldrán a la calle más de tres millones de personas para sentar las bases de una Cuarta Ola con más contagiados y más muertos. Yo a eso, aunque soy un analfabeto en Derecho, le llamaría prevaricación. Y ya sólo queda la esperanza de que el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña no sea cómplice de este bárbaro disparate, de este ciego egoísmo que puede provocar una abstención que sería todo un voto de censura a esta clase política que exhibe, con impudicia, su desprecio y su mezquindad".

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