Luis del Val: "Hay cuatro millones de españoles que solo son carne de trato para el tenor de la Moncloa"

Cuatro millones de españoles que "viven en Cataluña a su pesar", dice el profesor, y son "Los olvidados"

Luis del Val

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Luis del Val pone el foco de la imagen del día de "Herrera en COPE" en los catalanes no independentistas ni separatistas:

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"Ayer, lo que más llamó mi atención, no fue la letra interpretada por el tenor de la Moncloa, porque el libreto ya había sido repartido, sino la composición de los invitados donde estaban ampliamente representados los 3.700.000 catalanes que mandan en Cataluña, y apenas había un esbozo de los 4.000.000 de españoles que viven en allí, algunos de ellos, a su pesar.

Entre aquéllos estaba la acomodada burguesía sindical, y, luego, el sindicato de burgueses, cuyos apellidos o son los mismos o se parecen a los que halagaron a Azaña hasta que lo traicionaron, los que vieron cómo el Liceo se lo arrebató el Frente Popular para utilizarlo como escuela, los que recibieron con entusiasmo a Franco, que les devolvió el Liceo, es decir, los que siempre reciben con cortesía a cualquiera que venga de Madrid, que es de donde provienen las inversiones, las ayudas y las gangas para fortalecer el virreinato.

De los cuatro millones de españoles que viven en Cataluña apenas había algún ejemplar, y puede que tuviera que estar camuflado. Son, desde los tiempos de Zapatero, ”Los olvidados”, si me permiten tomar prestado el titulo de la magnífica película de Buñuel. Son los guardias civiles a los que se les niega la vacuna; es el profesor que debe disimular su escaso entusiasmo por la independencia de Cataluña para no estropear sus posibilidades profesionales; es el hijo del policía nacional, que oculta el trabajo que tiene su padre para no sufrir el desdén de sus compañeros; es la funcionaria de la Generalitat que no sabe qué excusa proporcionar, cuando su jefe le pregunta porqué no lleva un lazo amarillo; es el hermano, el cuñado, la nuera o el suegro de esas familias donde la aparición del asunto nacionalista encona las posturas y llega al alejamiento, o es la ruptura de esa amistad de muchos años por idéntica causa.

Ayer, se dio un espaldarazo oficial a ese totalitarismo que considera traidor a quien no piensa igual, y volvió de nuevo la espalda a los olvidados, a los que votaban socialista hasta que se dieron cuenta de que eran nacionalistas disfrazados; a los que se esperanzaron con Rivera... son todos esos que a los que el tenor no aludió, y que ni siquiera pueden hablar o examinarse en la lengua oficial de España. Cuatro millones de españoles, que sólo son carne de trato para el tenor de la Moncloa".

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