Visitamos las maravillosas catedrales de España de la mano de ‘los fósforos’

Con motivo del programa que este martes está haciendo ‘Herrera en COPE’ desde la Catedral de Burgos para celebrar el VIII Centenario (#catedral2021), hemos decidido que ‘los fósforos’ nos recomienden visitas a las catedrales que a ellos más les gustan.

Así, por ejemplo, estos son los gustos de Jesús “por fuera la catedral más bonita es la de Burgos, desde cualquiera lado, por sus gárgolas, estatuas, las agujas… Luego, ver la catedral al atardecer la de León es majestuosa, toda la luminosidad. Los tesoros, la de Toledo, simplemente ver esa Custodia. Lo más bonito de las catedrales de España”.

Thomas nos cuenta que a él la que le gusta es la Catedral de Santiago de Compostela donde ha estado trabajando durante ocho meses en la restauración de las rejerías, en concreto la rejería de la plaza del Obradoiro. Nos cuenta Thomas que “la singularidad del hierro de las catedrales es que estaba fabricado de una forma muy diferente a como se trabaja hoy en día, el hierro de esa época no se llegaba a licuar, era más blando y por eso se podían hacer esas maravillas que vemos en las rejerías. Hoy en día no podría hacerse.”, concluye.

Por su parte, Pilar nos recomienda la visita de un pequeño pueblo que se encuentra yendo a Lourdes por el Valle de Arán, Saint-Bertrand-de-Comminges, es un pueblecito como un dedal de grandes, pero llama mucho la atención su catedral que está sobre una montaña

José, nos llama desde Lorca para hablarnos de la Colegiata de San Patricio, que fue dañada en el terremoto de Lorca. Además, aprovecha para reivindicar los templos y las grandes iglesias españoles.

La ‘Bella Desonocida’ es como llaman a la Catedral de Palencia, así nos lo cuenta María José diciendo que “está sobre una cripta de San Antolín del siglo VII y tiene un altar mayor de 1304”.

Y por último, Rogelio Trifón, nos cuenta que cada noche del 28 de junio disfruta junto a la banda Sol en la catedral de Sevilla. Y dice “es impresionante pasearla solo por la noche, verla muy despacio y muy tranquilo”. Explica Rogelio que recuperó esta tradición para recordar las negaciones y lágrimas de San Pedro.