Naranjo III: "Llamarse Tsunami Democrático es como decir Terremoto Benévolo o Asalto Pacífico"

¿NOS HEMOS DEJADO ALGO SOBRE LA SENTENCIA DEL SUPREMO?

Sobre la sentencia del procés y lo que le rodea. Déjame que fije en una cuestión menor en apariencia: el nombre de los convocantes de las protestas. Se hacen llamar “Tsunami democrático”, una contradicción, un oxímoron maravilloso para definir como nadie la esencia del independentismo más aguerrido.

¿Y por qué no mejor “Terremoto benévolo”?. ¿O “Asalto pacífico”? ¿O “Agresión moderada”? Y es así todo: Puigdemont huido a 1500 kilómetros diciendo que “hay que estar cerca de los condenados” y los del tsunami liberando Cataluña por el peculiar método de secuestrar El Prat. Pese a lo dramático, todo esto tiene un punto cómico impagable y demuestra la naturaleza absurda del conflicto. Tanto que recuerda a Les Luthiers y su célebre ironía contra el nacionalismo de enemigos imaginarios:

Y continuamos con la parte entretenida de la política. Flavio Briatore, insigne play boy y directivo de Fórmula 1, funda partido en Italia. Se llama “Movimento del fare” y hace definitivamente de Italia el circo político más extravagante de Europa, con permiso de Cataluña. Estados Unidos, Italia, Ucrania, Rusia.... se lleva el político artista, polémico, chillón y con ese tipo de populismo de testosterona que al parecer gusta tanto. ¿Es ése el hueco que queda libre en la política española y cuándo y quién lo llenará?

Un informe del Insituto de Estudios Económicos ha demostrado, con números incontestables, que la presión fiscal en España es un 8% superior a la media de la Unión Europea. Algunos quieren subir los impuestos, pero este informe quizá demuestre que es una pésima idea. Y fíjate cómo han hecho la cuenta y cómo desmontan la que suelen hacer los Gobiernos para meterte la mano en el bolsillo: han dividido la recaudación entre los contribuyentes reales y no entre la población activa potencial. Y sale que unos pocos pagan mucho porque otros no tiene trabajo o su sueldo es de pena.

Uno de cada tres niños sufre desnutrición o sobrepeso. Es un informe de UNICEF y resume en una sola frase el problema de desigualdad en el mundo. A unos les sobran hamburguesas, a otros les falta leche. Ni un Nobel de Harvard podría resumir mejor con una cifra la condición humana.