Monólogo de Sergio Barbosa del miércoles 26 de diciembre de 2018

Redacción digital

Madrid - Publicado el - Actualizado

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Pues si Podemos gusta de arrimar el ascua a su sardina a los soberanistas catalanes, cuando se trata de valorar el discurso del Rey lo que les gusta directamente, y más en estas fechas navideñas, es interpretar el papel del Grinch, que el discurso fue decepcionante, que fueron palabras vacías (como si la matraca soberanista fuera un dechado de originalidad) y que el Rey se equivoca porque el problema en Cataluña no es de convivencia sino de democracia. Y hombre aquí, Quim Torra tiene razón pero no como él lo interpreta porque el problema fue de democracia cuando los soberanistas decidieron pisotear la Constitución y el estatuto e ignorar a más de la mitad de la población, que eso se nos olvida muchas veces. Sea como sea, Torra ha venido a echar agua fría sobre el optimismo con el que volvió Pedro Sánchez del Consejo de Ministros en Barcelona, dice el presidente catalán que como no permita el derecho de autodeterminación que se olvide Sánchez de contar con su apoyo para aprobar los Presupuestos Vamos, entre unas cosas y otras, a Torra no se le ve muy por la labor. El discurso de siempre sobre el juicio, los presos políticos y tal y Pascual.

Estas últimas horas hemos conocido también que en la famosa mini cumbre de la semana pasada Torra le puso deberes a Sánchez. Le dio un documento con 21 puntos entre los que se encuentra la mediación internacional para desfranquizar España, lo cual supone un insulto a España como Estado democrático miembro de la Unión Europea y de la OTAN, y como si Cataluña fuese el Sáhara Occidental. Pero claro, estamos hablando de la gente, porque ha dicho que aquí hay una crisis humanitaria, que hay presos políticos; así que con estos bueyes tendrá que dar Pedro Sánchez.