Pilar García Muñiz: "Lo del Gobierno es un acto de fe"

Analiza Pilar García Muñiz la actualidad centrándose en los indultos del procés y sus consecuencias y en la última oportunidad de España en la Eurocopa

Pilar G. Muñiz

Publicado el - Actualizado

7 min lectura

Buenos días, ¿qué tal están? Bienvenidos a 'Herrera en COPE'.

El BOE ya ha publicado los indultos del 1 de octubre, de manera que los condenados podrán salir a la calle. El Rey ya ha firmado el Real Decreto y está previsto que oficialmente abandonen la cárcel para no volver este mediodía.

Será una imagen dura para muchos españoles que no acaban de entender que quienes plantearon un chantaje al Estado de Derecho, con amenazas incluidas de desestabilizar la economía española, salgan de prisión, en muchos casos, sin haber cumplido un tercio de su condena. Solo se mantiene la inhabilitación para cargo público y la advertencia de que volverían a la cárcel si vuelven a cometer un delito grave.

El porqué de los indultos lo ha explicado de nuevo Pedro Sánchez, tras un largo Consejo de Ministros que se prolongó durante cuatro horas y media. De nuevo, la “utilidad pública” como argumento principal, algo que se entendería mucho mejor si la sociedad española viese un verdadero cambio de actitud en el independentismo. Lo de utilidad pública es solo un anhelo de Pedro Sánchez que insiste mucho en ello, pero es un concepto bastante subjetivo y que veremos a ver si se materializa en una mayor concordia y una mejor convivencia, dos palabras que también le hemos escuchado mucho en los últimos días.

Realmente lo del Gobierno es un acto de fe. Están convencidos, al menos eso dicen, de que los independentistas no repetirán sus actos y que sus amenazas de volver a hacerlo no irán más más allá de la retórica. Ahora, lo próximo es reactivar la Mesa de Diálogo donde desde el Gobierno han insistido en que habrá un límite, el que marca la Constitución. Eso es lo que dice el Gobierno, que no puede haber negociación más allá del marco constitucional. Decía la portavoz del Gobierno, María Jesús Montero, que no habrá referéndum ni declaración unilateral de independencia.

Es algo que choca directamente con la declaración del presidente catalán que primero ha recordado que los presos salen de la cárcel con la idea de construir una república catalana y, luego ha pedido pactar la celebración de un referéndum. Referéndum pactado pide Aragonés, algo que no tiene cabida en nuestra Constitución. Ni referéndum, ni amnistía como exigen los independentistas. Pues hoy se espera que los indultados salgan a la calle y hagan declaraciones a la prensa en esa línea.

Gestionar ese desgaste, esa continua provocación a una parte sustancial de la sociedad española va a ser el gran reto al que se enfrente ahora el PSOE. Cabe preguntarse, además, si esto al ser una “decisión de país”, como dice el presidente, no se debería haber consensuado con la oposición.

Sin embargo, Sánchez ayer sólo dedicó 4 minutos a dar explicaciones al conjunto de la sociedad española. Fueron cuatro horas de Consejo de Ministros como decíamos antes, pero solo cuatro minutos de comparecencia del presidente del gobierno sin preguntas de los periodistas. Le está cogiendo el gustillo a esto de que los periodistas no podamos preguntar. Lo cierto es que, si la intervención de Sánchez dejó un poco fría a la opinión pública, el informe del Gobierno en el que se basaron los indultos contiene pasajes que sí están generando debate. Como eso de apelar a la “grandeza” del separatismo o elogiar a Oriol Junqueras como “figura de un peso indiscutible en la relación entre España y Cataluña”, así como “una persona clave para restaurar la convivencia”.

Y, a todo esto, se sigue echando en falta un gesto, un guiño para los catalanes constitucionalistas que estos días se sienten tan descorazonados como en los peores momentos del desafío separatista. A esos catalanes el presidente Sánchez no se ha dirigido personalmente en ningún momento.

PREOCUPACIÓN POR LA VARIANTE DELTA

Y en las cosas de la pandemia, si uno analiza la situación hay motivos tanto para el optimismo como para cierta inquietud. El optimismo nos lo dan las vacunas, un 31'1% de la población ya tiene la pauta completa y un 49'4% tiene al menos una dosis. Pero ¡ojo!, porque los fallecidos y los contagios aumentan, si se tiene en cuenta el comportamiento diario de las últimas jornadas: 30 fallecidos en 24 horas, 4.040 contagiados y una incidencia acumulada, que ya sólo ha sido capaz de bajar unas décimas. De hecho, prácticamente se estanca en 92'25 casos por cien mil habitantes.

¿A qué se debe ese estancamiento de la incidencia? Pues parece cada vez es más evidente que la causa hay que encontrarla en el repunte de casos entre la población más joven, la que tiene más vida social y, encima, no está vacunada. Eso puede estar detrás de los repuntes que ya se registran, por ejemplo, en Cataluña, Cantabria y Andalucía donde la provincia de Córdoba ya está en “riesgo extremo”.

A esto sumen que, en La Coruña, ya se ha detectado la presencia de la variante Delta (la originaria de La India) en las aguas fecales. Se calcula que esa variante india podría ser mayoritaria en España en dos o tres semanas. Y el problema es que esa variante, según algunos estudios, puede llegar a ser hasta cuatro veces más contagiosa que la variante original. De hecho, el contagio entre dos personas en un lugar cerrado y sin mascarillas puede darse en cuestión de segundos.

Así que habrá que seguir pidiendo prudencia, y más en un día en el que vamos a conocer los detalles del fin de la obligatoriedad de las mascarillas en los exteriores.

ESPAÑA, ÚLTIMA OPORTUNIDAD PARA SEGUIR EN LA EUROCOPA

Mañana ya saben que se va a celebrar otro Consejo de Ministros, en este caso extraordinario, para aprobar precisamente el fin de las mascarillas al aire libre y la bajada del IVA de la factura de la luz.

Pero miren por dónde hay otro tema, que sin haberlo planificado, le puede servir también a Pedro Sánchez como cortina de humo para tapar la polémica de los indultos. Sí, el fútbol, porque España se la juega esta tarde frente a Lituania y como no gane o no se clasifique para la siguiente ronda, ya les digo yo que no se va a hablar de otra cosa.

Va a ser el tercer partido de la fase de grupos después de dos empates tristes, insulsos, de nuestra Selección. Hay que reconocer que cuando juega La Roja generalmente nos contagia un estado de ánimo, pero en esta Eurocopa todavía no nos ha despertado el de la alegría. Está a tiempo de hacerlo, eso sí, aunque los de Luis Enrique empataran esta tarde a partir de las seis frente a Eslovaquia podría pasar a octavos.

Es algo así como un aprobado raspado con el que pasas de curso sin ningún entusiasmo aunque luego puede llegar un profesor duro y te catea. Pues eso es lo que le puede pasar a España si no mejora. Y hoy le vale el empate para pasar de fase si Polonia no gana a Suecia. La única combinación que puede resultar letal para nuestra Sselección es que Eslovaquia nos gane. Esa, sin duda, sería la puntilla.

La verdad es que lo de España en la Eurocopa no empezó bien, con la vacunación tardía, con el positivo de Busquets que nos recordó que nadie había hecho los deberes a tiempo y, luego en el campo con un equipo que no tiene gol y que, sobre todo, como les decía antes que no genera entusiasmo.

Nada que ver, ni de lejos, con la alegría que contagió en el Mundial de Sudáfrica o en la Eurocopa de 2008 con la victoria frente a Alemania. Lo dicho, no hemos empezado bien, pero a tiempo estamos de cambiar el rumbo.

Esta tarde a partir de las seis vuelve a rodar el balón para España y lo vamos a poder seguir con el equipo líder de la radio deportiva española, en el ‘Tiempo de Juego’ Especial Eurocopa, aquí en la Cadena COPE.