En 'Herrera en COPE'
"Alguien tendría que haber visto a una niña de tres años de noche y asustada”
Madrid - Publicado el - Actualizado
2 min lectura
Ha pasado ya más de un mes de la desaparición y posterior hallazgo junto a las vías del tren del cuerpo de Lucía Vivar, la pequeña de tres años de Pizarra (Málaga) a quien se le perdió el rastro mientras jugaba con sus primos junto a al bar donde cenaban sus padres.
El cuerpo de la niña fue hallado horas más tarde en una vía del tren a varios kilómetros de la localidad. La principal hipótesis de su muerte se basa en que la niña caminó cuatro kilómetros hasta la estación de tren, se quedó dormida en la vía y uno de los convoys la golpeó.
Sin embargo la familia de la pequeña sigue sin creer en la hipótesis de la muerte accidental y está convencida de que la pequeña no pudo caminar los 4,2 kilómetros que separan el punto donde se le perdió la pista y el lugar donde se halló su cuerpo. Por esta razón, van a solicitar que se haga una reconstrucción del recorrido por las vías del tren.
En 'Herrera en COPE' la letrada y portavoz de la familia, Ana Belén Ordóñez ha explicado esta tesis. “No es solo la distancia, sino que había solo un 8% de visibilidad, tenía que cruzar un puente sin barandas y hay varios cruces de vía. Supuestamente sortea todo y sigue caminando en la misma dirección”.
ESCUCHA LA ENTREVISTA COMPLETA | Ana Belén Ordóñez en 'Herrera en COPE'
Además explica la letrada, “ninguna de las personas que participó en la búsqueda de la menor se la cruzó. Alguien tendría que haber visto a una niña de tres años de noche y asustada”.
Señala también que los padres sabían que la niña nunca se hubiera alejado sin su chupete, que según ha advertido "apareció debajo de un banco de la estación en la dirección contraria de donde la niña salió".
Además asegura que según los expertos que trabajan con la familia “las chanclas de Lucía no llevaban marcas de haber caminado tantos kilómetros” y que sus piernas tan solo presentaban "algún rasguño" tras haber caminado esa distancia por una vía llena de arena y piedras y en plena noche.
En esta línea el abuelo materno de Lucía ha afirmado que "no se fue de ninguna de las maneras por sí sola". Francisco Hidalgo, ha insistido en que "es imposible que la niña llegara allí sola, se la llevaron" y ha invitado a todas las personas que quieran a que hagan el recorrido y saquen sus propias conclusiones.
Francisco Hidalgo ha explicado que desde la muerte de Lucía se ha hecho muchas preguntas y ninguna tiene respuesta, no entiende el por qué los perros no seguían vía arriba buscándola y por qué los perros daban vuelta alrededor de la estación, que era donde había estado.