El aviso de un médico a las mujeres que toman bebidas vegetales a diario: "En su composición..."

Hace algunos años, cuando íbamos al supermercado, solo había tres tipos de leche: entera, desnatada y semidesnatada. A día de hoy, la oferta es mucho más amplia. Podemos encontrar leche de soja, de cabra, de oveja, sin lactosa o de almendras, entre otros.

Según datos del Ministerio de Agricultura, en los últimos 20 años el consumo de leche ha caído bastante. En 2023, los españoles bebimos 63 litros per cápita, mientras que dos décadas antes superamos los 91.

Un cambio de tendencia que preocupa al sector ganadero. Según datos de la Asociación Española de productores de alimentos y bebidas vegetales, en 2023 el consumo de estas bebidas creció casi un 6% y las que más se vendieron fueron de avena, de soja y de almendra.

Más allá de las cifras de venta, es importante fijarse en los valores nutricionales, ya que hay quien pone en duda que la leche y la bebida vegetal aporten los mismos elementos. De hecho, la OMS alerta de que este cambio en el consumo está provocando un déficit de yodo en la dieta de los europeos.

En 'Herrera en COPE' hemos puesto el foco en este fenómeno de la mano del director del Departamento de Medicina de la Universidad Complutense de Madrid y doctor en medicina, Luis Collado.

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El aviso de un médico a las mujeres que toman bebidas vegetales a diario: En su composición...

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"Yo bebo leche de vaca, por edad y porque vivo en una casa con mujeres, desnatada o semidesnatada", ha comenzado diciendo el experto.

Explica que, en nuestro país, el "problema" parte de que nos fiamos mucho de la información que recibimos por redes sociales que, en muchas ocasiones, no tiene una base científica.

Por qué no existe la leche de soja o de almendras

En primer lugar, Collado aclara porque debemos llamarlas bebidas vegetales: "No existe la leche de soja o de almendra porque no se pueden ordeñar, la leche solo proviene del ordeño de mamíferos. Lo demás son bebidas vegetales, que además, son más caras curiosamente".

En cuanto a su composición, "la mayoría de bebidas vegetales están compuestas por agua. Proteínas prácticamente no tienen, mientras que en la leche de vaca, las proteínas y vitaminas son muy fáciles de absorber por el cuerpo".

Es decir, hay mucha diferencia entre los valores nutricionales de ambos: "Las bebidas vegetales tienen menos calorías porque llevan agua y edulcorantes, en vez de azúcar. Pero las pocas proteínas que tienen son de menor calidad que las de los lácteos".

Por otro lado, el doctor en medicina ha desmentido la leyenda que dice que el hecho de que el ser humano sea el único que siga bebiendo leche después de ser lactante es algo malo.

"También somos el único animal que cultivamos la tierra para comer vegetales. Es una leyenda negra que le están intentando colgar a los lácteos, no se muy bien con qué fin", aclara.

La importancia del calcio

Respecto a la leche como fuente de calcio, Collado explica que el que contiene la de vaca es "muy fácil de absorber" mientras que "hay bebidas vegetales que llevan calcio de producción sintética".

Y es que el calcio es esencial para nuestro organismo, sobre todo para el de las mujeres. Lo necesitan "tanto los hombres como las mujeres, aunque más ellas, ya que a partir de determinada edad comienzan a sufrir una pérdida de calcio que depende de la masa ósea". Por tanto, si durante la infancia y la juventud consumen menos calcio del necesario, puede derivar en problemas años después.

Por último, el médico recuerda que, el mejor sitio para guardar la leche es en la nevera "una vez abierta", mientras que "antes de abrirla, es mejor tenerla fuera".