Este es el hábito que deben evitar los padres para que sus hijos tengan alergia: confirmado por un médico

Se calcula que entre el 20 y el 25 por ciento de la población mundial sufre alguna enfermedad alérgica a alimentos, medicamentos o a elementos ambientales como el polen de las plantas. Lo mismo usted está en ese grupo, porque solo en Europa hay más de 150 millones de alérgicos.

Los expertos advierten de que los casos se multiplican, cada año son más.

La contaminación, el cambio climático, nuestros hábitos de vida, la globalización. Son muy variados los factores que favorecen en todo el planeta un aumento de las alergias a alimentos, medicamentos y elementos ambientales. Aunque son más frecuentes en los países ricos, no hay región del planeta que se libre. Los expertos estiman que en 2050, la mitad de la población mundial sufrirá alguna alergia. En concreto, 4.000 millones de alérgicos en poco más de 25 años.

Hablamos sobre este asunto en 'Herrera en COPE' con Tomás Chivato. Es alergólogo, profesor de alergología y decano de Medicina en la Universidad CEU San Pablo.

Al comienzo de su intervención, ha asegurado que somos alérgicos a cosas que no sabemos, hasta que se hace la prueba pertinente. "Es imprescindible hacerse el diagnóstico para conocer la causa", explica en los micrófonos de 'Herrera en COPE'.

El experto indica que la contaminación ambiental propicia ese incremento en el número de alergias. "La contaminación hace que los pólenes sean más agresivos. Aunque también hay una predisposición genética y el hábito de vida que llevamos. Por ejemplo, el tabaco es muy importante. Está demostrado que los hijos de padres fumadores desarrollan con más frecuencia enfermedad alérgica".

Luego hay otro fenómeno, y es que cuando las plantas se 'estresan', "también como los seres humanos, y liberan proteínas de estrés. Es multifactorial. Desde luego, no hay una respuesta única a esta incidencia".

¿Y se puede hacer algo para prevenir, desde la infancia, el desarrollo de alergias a ciertos alimentos? Responde que, en concreto, se pueden hacer tres cosas: disminuir el consumo de tabaco (porque si un padre fuma, tienen más posibilidades los pequeños de desarrollar alergias), potenciar de nuevo la lactancia materna y hay que "intentar evitar tanto producto agresivo que se utilizan para bañar a los niños".

"Tenemos que clasificar las enfermedades alérgicas en intermitentes o persistentes"

Respecto a cómo diferenciar entre una alergia leve y una reacción alérgica más seria, explica que "tenemos diferentes grados de afectación. Cuadros leves, moderados, graves e incluso mortales. Luego también tenemos que clasificar las enfermedades alérgicas en intermitentes o persistentes".

El cambio de temperaturas, por otro lado, hace que "pólenes hayan producido mucha sintomatología. Cuando un cuadro se convierte en persistente, que afecta tantas semanas y afecta a la calidad de vida, pues entonces hay que saber a qué se tiene alergia para tomar las medidas adecuadas".

Hay dos tipos de tratamiento para los cuadros de alergia: antihistamínicos, y vacunas específicas. Y también hay, incluso, vacunas para hongos y alergias a alimentos como el melocotón. Un último 'escalón' del medicamento son "los nuevos fármacos biológicos que nos permiten controlar la enfermedad alérgica grave. Son de uso hospitalario habitualmente".

Por último, hablamos sobre cómo prevenir la aparición de la alergia. Sobre todo, los hábitos de vida saludables son fundamentales.