Antonio Herraiz: "¿Con quién está el Gobierno? ¿Con lo que denuncia la ONU o con quien apoya Zapatero?"
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Avanza este Herrera en COPE del 15 de agosto. Es día grande, es la Asunción de la virgen, que nos lleva a la virgen de agosto, que es como muchos llamáis este día, feriado prácticamente en toda España. Los que habitualmente no trabajan en festivo tienen esa extraña percepción de que en una jornada como la de hoy no trabaja nadie. Ni te cuento si estás de vacaciones. Pues sí.
Mira, no solo nosotros laboramos en un 15 de agosto. Miles de españoles. Es tan amplio el catálogo de profesiones que están al pie del cañón, hoy y todos los festivos... Los sanitarios en hospitales, los que cuidan a nuestros mayores en las residencias, policías, guardias civiles, todos los que os dedicáis a la seguridad privada, los profesionales del transporte, camioneros, taxistas... también el personal de estaciones, aeropuertos... todos los que estáis en infraestructuras básicas e imprescindibles.
Mira, también muchos artistas que esta noche o mañana vais a tocar en la verbena de un pueblo. Los hosteleros... en fin, capítulo amplio que nos acerca al consuelo de que no somos una rara avis.
Jueves en el que no conviene perder la pista de la DANA que va a seguir dando sus últimos coletazos en parte este de la península, Cataluña, Comunidad Valenciana, Región de Murcia, pero sobre todo en Baleares.
DANA que ha provocado momentos de máxima preocupación en Formentera, con la desaparición durante varias horas de un pescador, localizado con vida y agarrado a su embarcación que había quedado completamente destrozada.
También en Formentera un grupo de italianos vivió momentos de angustia cuando su velero comenzó a golpear contra las rocas de una cala. Dos de estos turistas resultaron heridos y a uno de ellos le tuvieron que amputar un dedo.
Y en Mallorca a esta hora sigue la alerta máxima. Están prohibidas las actividades al aire libre. Siempre hay lumbreras que se las saltan. Porque lo que te acabo de contar de Formentera, pues no conocemos por qué estaban en el mar... pero que había alerta, que era potente, se sabe desde hace varios días y no será porque no lo venimos advirtiendo.
DANA, temporal, que ha provocado importantes incidencias en el aeropuerto de son Sant Joan. Medio centenar de vuelos cancelados, seis derivados a otros aeródromos y retrasos prácticamente en todas las operaciones. Jaume y Paula pretendían viajar desde Palma a Barcelona. Su avión no ha salido. Y el caso de Jaume y de Paula se ha repetido con miles de pasajeros que pretendían llegar o salir de la isla en uno de los días con mayor tránsito de todo el año.
Estamos en el ecuador del mes y se ha cumplido una semana de la nueva fuga de Puigdemont. Ahora el juez Llarena tiene que analizar los informes tanto del ministerio del interior como de los Mossos d'Escuadra para determinar si se cometió un delito, una cooperación necesaria, al margen del papelón que encargaron a los agentes-escolta que activamente se implicaron en la fuga del líder de Junts.
Sobre los detalles de la huida, pues poco más. Que entre todos la mataron y el solito, con Turull y con quien fuera se fugó. Ahora el debate está centrado en presionar al Supremo para que aplique la amnistía total a Puigdemont. No quieren que el prófugo pase más tiempo jugando al gato y al ratón.
Moncloa y el PSOE quieren restablecerlo cuanto antes, no sea que se nos vaya a enfadar y se rompa la baraja. Y están empleando estos festivos de agosto para señalar el camino que debe tomar el juez Pablo Llarena y, si no, el Constitucional, confiados de que Pumpido y el resto de magistrados designados por el PSOE harán su trabajo de guante blanco, aun con las togas manchadas con el polvo del camino.
El designado para señalar al juez Llarena continúa siendo el ministro Óscar Puente, que se sigue cobijando en su condición de abogado, se presenta como jurista al que le falta añadir eso de reconocido prestigio. Estamos a dos comparecencias más para que nos los diga.
Libertad de expresión es lo que cuestiona el ministro, poniendo a su cohorte de asesores a trabajar para que le cuenten quién o quiénes osan a fiscalizar su trabajo como miembro del Ejecutivo. Porque Óscar Puente sabe que cualquier opinión que se lance desde el Gobierno supone un extra de presión. Da igual el ámbito, pero mucho más en el de la Justicia. Y eso se lo están recordando en las últimas horas todas las asociaciones, de sensibilidades diferentes.
Lo que dice un ministro siempre tiene influencia. Por eso, aunque se le agradece a Puente su sinceridad, claro que también puede ejercer la libertad de expresión como le convenga, lo de respetar la división de poderes es algo básico dentro de cualquier democracia. ¿Qué hay controversia jurídica dentro de la decisión del juez para no amnistiar en su totalidad a Puigdemont?
Se puede aceptar, aunque lo que hay son unas prisas locas del Ejecutivo para el perdón total, para que vuelva cuanto antes y no tener que soportar por más tiempo un chantaje llevado al extremo, que ha dejado en ridículo tanto al ministerio del interior como a los Mossos d'Esquadra. No pueden aguantar por más tiempo, o no es conveniente, que la fragilidad de la legislatura sea cada vez mayor, y con Puigdemont sin amnistiar eso va a ser inevitable.
Por lo demás, volvemos a mirar a Venezuela. Se van a cumplir tres semanas de las elecciones presidenciales y aunque parezca que nada se mueve, aunque cunda la sensación de un cierto inmovilismo que puede llegar a traducirse en resignación para asumir el fraude, no es así.
Por de pronto, este sábado hay convocadas manifestaciones en todo el mundo convocadas por la oposición para denunciar el pucherazo.
La líder opositora ya ha dicho que estará en Caracas, aun a riesgo de ser detenida y la comunidad internacional tiene una buena oportunidad para pronunciarse. No es asumible que casi tres semanas después -se cumplen este domingo- el régimen de Maduro no haya permitido la revisión total de las actas por organismos independientes. No se puede permanecer impasible ante la persecución a la disidencia, con una treintena de muertos, cientos de detenidos, encarcelados e incluso secuestrados, en un recrudecimiento sin precedentes de la violación de derechos humanos.
Y este sábado hay una oportunidad para que todo esto tenga una respuesta no solo en las calles de Venezuela. Ya sabemos que nuestro Gobierno anda de perfil, equiparando a la oposición con el régimen. Ya sabemos que andan más preocupados en blanquear a José Luis Rodríguez Zapatero, cooperador necesario y cómplice de todas las tropelías del régimen. Pero si quisieran colocarse del lado correcto, habrían respaldado hace tiempo al ganador de las elecciones, a Edmundo González Urrutia, como hace 5 años hizo el propio Pedro Sánchez. Entonces sí denunció el fraude y amenazó con sumarse al reconocimiento de Juan Guaidó como presidente electo.
¿Qué ha cambiado? Y no solo está el posicionamiento claro, directo, sin ambages de Zapatero con el régimen. También está esa visita de la vicepresidenta Delcy Rodríguez, su llegada a Barajas y esas sospechosas maletas, que estaban cargadas de toda la podredumbre que encierra la narcodictadura de Maduro.
A la presión internacional contra el régimen, no precisamente desde España se ha sumado la ONU. Denuncia falta de transparencia en el proceso. Señalan que han incumplido las medidas básicas de integridad. Y también denuncian la represión.
¿Con quién está el Gobierno de España? ¿Con lo que denuncia la ONU o con quien apoya Zapatero?