El adiós de Manuel Marchena, el juez que presidió el juicio a los líderes del procés y rechazó el CGPJ
José Antonio Zarzalejos pone el foco en la despedida de un juez que ha hecho historia en España y en Europa
Publicado el - Actualizado
2 min lectura
En medio de esta tormenta judicial que compromete al Gobierno y al PSOE ante la Sala Segunda del Supremo, este jueves se producirá un hito singular: Manuel Marchena deja la presidencia de esa Sala, la Penal, tras dos mandatos de cinco años, no prorrogables, y se trata de un magistrado que ha hecho historia. José Antonio Zarzalejos lo analiza en su 'Sexto Sentido'.
"Presidió el juicio oral en el que se juzgó en 2017 a los 9 dirigentes (no a los que se fugaron) del proceso soberanista en Cataluña y fue el ponente de la sentencia que, dictada por unanimidad de las Sala (siete magistrados) les condenó por sedición, malversación y desobediencia.
El juicio oral en el Supremo marcó un hito, no solo en la jurisdicción española, sino también europea. No exagero en nada. Marchena quiso y logró que se celebrase en la sede del Supremo (la plaza de la Villa de París) y no en un pabellón como otros macrojuicios. No solo: acomodó a los más de 600 periodistas acreditados para seguir la vista. Se retransmitieron en directo las 52 sesiones del acto judicial.
No quiso disponer del ‘botón del pánico’, es decir, de un dispositivo que cortase la retransmisión en caso de surgir un imprevisto. Quería con ello acreditar la voluntad de transparencia del tribunal en la vista oral. Solo exigió que en la emisión no hubiese primeros planos de los magistrados y de los encausados, tampoco de los letrados ni de los fiscales.
Encargó un catering para que los miembros del tribunal no tuviesen que salir del Supremo y así evitar filtraciones y despliegue de dispositivos de seguridad excesivos. Estos encuentros facilitaron los debates hasta lograr una sentencia de unanimidad.
Tuve la ocasión de hablar con varios corresponsales extranjeros, verdaderamente sorprendidos de la transparencia de nuestro Tribunal Supremo en un caso tan delicado. En sus países (Francia, Italia, Alemania) no disponían de precedentes. No hubo ni un solo incidente.
Y todo eso lo dirigió Manuel Marchena que pasará a la historia judicial de nuestro país por esas sus decisiones, compartidas por la Sala, así como por la aplicación de la ley de la amnistía, por la oposición, antes, del Tribunal al indulto en 2021 y, entre otros muchos asuntos, por la interpretación de la Sala, con Marchena a la cabeza, de la ley del ‘sí es sí’ cuyas repercusiones (mayormente negativas) están en el recuerdo de todos y por la inédita apertura de una investigación penal al fiscal general del Estado".