Mario Alcudia sobre la Jornada de responsabilidad en el tráfico: “Viajar siempre haciendo el bien”

Nos contaba esta semana

que es huérfano por un accidente de tráfico. La carretera, dice, no se ha portado bien con él. En un siniestro murieron también su tía y dos personas más. También fueron víctimas de la carretera, su madre, su amigo y una amiga íntima que murió atropellada con 17 años. A raíz de aquellas durísimas, traumáticas experiencias,

. 14 años como socorrista en la Cruz Roja y 35 de los 42 como policía local, entregados a la

. De hecho se jubiló hace 10 años pero todavía cuenta sentirse con ánimo para seguir interviniendo en los cursos de reeducación y recuperación de puntos del permiso de conducción de la DGT.

Otra historia más, hace justo ahora 10 años, Emmanuel Bergoglio, sobrino del Papa Francisco sufrió un grave accidente en el que perdieron la vida su mujer y sus dos hijos pequeños.

San Cristobal, patrón de los conductores

Y junto a la pérdida de vidas, qué decir de las graves secuelas físicas, muchas irreversibles…Desgraciadamente, casos como estos son frecuentes. Unas 1100 personas cada año, o lo que es lo mismo, unas 3 personas al día, pierden su vida en un accidente de tráfico. Seguro que tú conoces alguna cercana y tan dolorosa como estas que te he relatado.

Te cuento todo ello porque este domingo, primero del mes julio, la Iglesia nos invita a celebrar la 56 Jornada de responsabilidad en el tráfico. Una fecha que coincide con el inicio de los desplazamientos masivos, las denominadas operaciones salida de vacaciones de verano, próxima a la festividad del patrón de los conductores y transportistas, San Cristóbal, el miércoles; este año tomando como lema la frase de san Juan, “Yo soy el camino y la verdad y la vida”.

Caminar con Jesús nos obliga a ser buen conductor

Y es que el camino, como la carretera o la autopista, es un lugar de tránsito, de salida, de llegada y de encuentro. Y caminar con Jesús nos obliga a ser buen conductor, responsable, cumplidor de las normas de tráfico y respetuoso con los demás conductores. Como rezamos en la oración a la Virgen de la Prudencia: “No por temor a la multa sino por amor a Dios y respeto a mi prójimo”.

Bien sabemos que somos muy frágiles y, al menor descuido, podemos perder la vida; por eso, debemos tratarla con mucho respeto.

La Iglesia con esta Jornada trata de sensibilizar y concienciarnos sobre la importancia y compromiso que tenemos para ejercer el mandamiento del

” a la hora de circular con responsabilidad en nuestros vehículos;

, a los demás, con la llamada a la prudencia y a la cautela a la hora de disfrutar del tiempo de ocio y descanso estival.

Por desgracia, bastantes de esas muertes se producen por distracción, falta de prudencia, responsabilidad o conductas nada samaritanas como como la soberbia o la prepotencia, porque en ocasiones el volante es capaz de transformar a las personas. Por eso también una llamada a la templanza en una jornada como esta.

La Jornada trata de concienciarnos sobre la importancia y compromiso que tenemos para ejercer el mandamiento del “no matarás”

En las calles y carreteras hay mucha gente buena que diariamente se esfuerza como conductores o peatones por hacer las cosas bien, cumpliendo las normas de tráfico y cuidando de la seguridad vial, o lo que es lo mismo, salvando vidas. En esto de la sensibilización y la concienciación todos tenemos bastante que decir y hacer; el conseguir ese reto de siniestralidad cero en 2050 es responsabilidad de todos.

Ante ese primer gran éxodo vacacional, la Iglesia quiere a través de esta jornada, de la que como te decía ya van 56 ediciones, aportar su granito de arena; y junto a esa templanza en lo personal, otro elemento fundamental que se nos recuerda a quienes tenemos fe es el que no falte en nuestro vehículo un momento de oración y gratitud a Dios para que oriente nuestra conducta al volante; porque rezar para tener un buen viaje nos estimula a poner los cinco sentidos para conducir con responsabilidad, disfrutar del viaje, respetar a nuestro prójimo y de este modo, pasar haciendo el bien a todos.

Que no falte en nuestro vehículo un momento de oración y gratitud a Dios

Quizá tú ahora nos escuchas desde tu vehículo porque estás trabajando, porque vas de cena con tus amigos o con tu familia, porque vas o vienes de tus vacaciones… a lo mejor estás preparando todo para salir en estos días de viaje. Pues si es así, nada más arrancar recuerda que siempre ese viaje ha de ser de ida y vuelta y que el que va en el coche de al lado es tu hermano; y pide, además, que santa María de la Prudencia y san Cristóbal te proteja y acompañe en cada uno de tus desplazamientos.