Expósito y 'La Linterna' volvieron a La Palma un año después: "Hay días que no quiero ni salir a la calle"
El 20 de septiembre, Expósito y su equipo regresaban a la isla, cuando se cumplía un año del comienzo de la erupción, para contar, sobre el terreno cuál es la situación
Madrid - Publicado el - Actualizado
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85 días fue el tiempo que duró la erupción del volcán Cumbre Vieja y que paralizó la isla de la Palma durante tres meses. La erupción comenzaba el 19 de septiembre de 2021, pasadas las 15:00 horas, y el 13 de diciembre de ese mismo año se daba por finalizado el proceso eruptivo, en lo que sería el principio del final. El 25 de diciembre, día de Navidad, tras unos días prudenciales de calma en el volcán, los expertos daban por finalizada la erupción.
Un año después de aquel mes de septiembre, Ángel Expósito y el equipo de 'La Linterna' regresaban a la isla para conocer, de primera mano, la situación en la que se encuentra. El día 20, ya sobre el terreno, hablaban con vecinos afectados que seguían viviendo en hoteles, y sin fecha para poder volver a una casa.
'La Linterna' desde La Palma un año después
Gregorio tenía una casa en Todoque que fue destruida por el volcán. Vive ahora "en una residencia que se paga por días". "Tengo que sacar de mi bolsillo" para pagar su alquiler, explica Gregorio, y eso a pesar de las ayudas prometidas por las autoridades públicas. Porque no llegan. En la calle la gente se pregunta "te han dado algo". Y a pesar de que no han recibido nada, tendrán que levantar sus vidas de nuevo. Todo ello aunque "la industria turística no se ha levantado", como apunta el vecino.
"Tres días antes del volcán hice un seguro de 70.000 euros, pensando que no iba a reventar ningún volcán", confiesa Gregorio. Pero le valoraron la casa muy por debajo de lo que realmente costaba. "Ya me dirán la casa que vale aquí 112.000 euros", critica el canario. Y aún así, como le han transmitido los asesores: "Tampoco me van a dar la ayuda completa". "Solo me han dado diez mil euros de donaciones por casa sepultada", lamenta Gregorio.
"Una cosa es la que se ve por la calle y otra lo que se ve cuando salgo a la calle". El coste de la falta de ayudas pesa sobre vecinos como Gregorio: "Hay días que ni quiero salir". Su situación es tan deseperada que siente que se tiene que "buscar la vida" sin la ayuda de las instituciones. "Terminaré yendo a vivir al Ayuntamiento porque no hay vivienda", declara.
Él es mayor: "Tengo 66 años". Todo por lo que había ahorrado ahora ha desaparecido. Cuando pensaba que ya podría descansar, todo ha cambiado: "Tenía la vida más o menos resuelta, ahora vivo de seiscientos euros".