La raza de perros con la que un centro de Palencia ayuda a personas con discapacidad: "Es de las mejores"

Linda, Camarón o Galilea son las tres mascotas del Centro Sociosanitario Hermanas Hospitalarias, pieza clave en la recuperación de pacientes mentales

Redacción digital

Madrid - Publicado el - Actualizado

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Siempre se ha hablado de la estrecha relación de las personas con los perros. El mejor amigo del hombre que dicen. Pero en este caso, va un paso más allá. Este centro de Palencia lleva más de una década trabajando con una raza de perros. La eligieron por las características que tiene. De hecho, el responsable del programa, Salvador Tocino, cree que es una de las mejores razas para desempeñar esta tarea.

Se trata de un centro en el que hay varias áreas,viven muchos pacientes, y muchos animales: “Surgió en el 2010 por la necesidad de encontrar nuevas herramientas terapéuticas para las personas que viven en nuestra institución. Una de ellas que estaba poco trabajada era la interacción con el animal. Están desde el principio dentro del recinto, son compañeros de trabajo y desarrollan su vida dentro de la institución”.

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Una raza de perro para ayudar a personas con discapacidad

Linda, Camarón o Galilea. Son tres galgos que viven en Palencia. Están en el Centro Sociosanitario Hermanas Hospitalarias. Y allí juegan un papel fundamental. Son tres de los seis perros que participan en el programa de terapias asistidas. De hecho, este centro es uno de los más importantes en este área. Llevan más de once años realizando estas terapias con animales, y son más de 300 personas las que se han beneficiado.

Suelen ser pacientes con problemas de salud mental o algún tipo de discapacidad. Pero lo cierto es que también hacen una labor muy importante acompañando a los mayores. Desde que todas estas personas han empezado esta terapia, su calidad de vida ha mejorado mucho. “Prácticamente a todas las personas les gusta los perros, pero los galgos, por su naturaleza, es un animal muy afable, cariñoso, no es agresivo y es muy leal, aunque eso lo son casi todos los perros”. Explica Salvador, trabajador del centro en La Linterna.

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¿Cómo ayudan los perros a los pacientes con enfermedades mentales?

Además de ser un miembro más, son una parte indispensable en el centro. Aunque comenzaron este proyecto con la incógnita de si funcionaría o no, lo cierto es que ha sido increíble ver cómo han mejorado las personas que reciben esta terapia. Pero ¿en qué consiste? Son sesiones programadas, y dependiendo del tipo de pacientes, se hacen unas cosas u otras. Pero en todas ellas la parte fundamental es la relación que se establece con el perro.

“La sesión es muy agradable porque, en un ambiente sociosanitario cuando llega un galgo a una sesión programada es agradable para todo. Para las personas con salud mental la actividad es dentro de las perreras cuidando de los animales, dándoles de comer. Con las personas con discapacidad intelectual se trabaja con unos objetivos”, aclara Salvador.

Todas las personas con discapacidad intelectual que se han beneficiado de estas terapias, han conseguido mejorar en diferentes ámbitos. Este centro además incluye en estas sesiones a personas con casos límites. que no han respondido a ninguna otra terapia y, con esta, lo han conseguido. “Aumenta el autoestima, la responsibilidad, la relación con otras personas mejoras y es por un efecto motivador que tienen los perros”. El trabajo diario con los perros, con la ayuda de las enfermeras del centro, hace que esto sea posible. La implicación de los pacientes ha jugado a favor desde el inicio.

“Los animales siempre acuden y las personas se han convertido en auténticos cuidadores, se preocupan de que todos estén bien antes de dormir y se levantan antes de hora para volver a verlos”, apunta el trabajador del centro de Palencia. Una implicación total, porque también están felices de poder estar con los galgos. Una de las personas que lleva años beneficiándose de estas terapias es Jesús. Vivía en Madrid, pero finalmente se fue a Palencia, ahora vive allí, en el Centro de las Hermanas Hospitalarias.

Premio Nacional de Enfermería en Desarrollo

Aunque es un proyecto en el que participa personal de enfermería, el centro cuenta con trabajadores sociales como Marta. Ella trabaja con Jesús, y sabe de primera mano cómo ha mejorado su vida: “Mejora los impulsos, están más relajados, y les da libertad para pasear con ellos, al final tienen una vida lo más normalizada posible”

Las mejoras están ahí, son evidentes. Hay una cosa muy especial que casi todos los pacientes adoptan. Es la responsabilidad que asumen en el cuidado de los galgos. Están pendientes de cuidarlos. de que estén lo mejor posible y eso repercute directamente en su felicidad.

Con este programa además recibieron el Premio Nacional de Enfermería en Desarrollo. Un premio que busca reconocer las mejoras en pacientes de maneras muy diferentes. Además de esas personas con discapacidad intelectual, también se benefician muchos otros pacientes relacionados con problemas de salud mental, trastornos bipolares, trastornos depresivos, o esquizofrenia.