Así son los diferentes tipos de secuestros que se producen en el mundo

Dicen los que saben de los temas de seguridad que los malos no descansan y que siempre van por delante. Lamentablemente hay delitos que con el paso de los años han evolucionado. Uno de esos es el de los secuestros. En la década de los 70, los 80 e incluso los 90, España despertaba noticias como éstas.

Durante años los secuestros de ETA y los GRAPOS fueron una amenaza real. Con la derrota de los terroristas este delito pasó a formar parte de las páginas de sucesos relacionado siempre con la extorsión, el chantaje y el crimen organizado. En los últimos años los malos han dado una nueva vuelta de tuerca y son cada vez más habituales los secuestros virtuales.

Las fuerzas de seguridad se han ido adaptando a los retos a los que les han ido sometiendo los criminales. En esta materia como en tantas otras la colaboración internacional es fundamental.

La globalización es una realidad. Hace unos meses Ángel Expósito viajó a Mali y allí conoció a la hermana Janet, una colombiana con una fuerza increíble. Mientras hablaba con ella le contó que cada día se levantaba pensando en la hermana Gloria, una religiosa también colombiana que desde hace más de un año y medio permanece secuestrada por los terroristas.

La noche del 7 de febrero de 2017 Janet recibió una llamada de teléfono. Una de sus hermanas que trabaja al norte de Mali la llamada alertándola de que estaban siendo atacadas por yihadistas. Los terroristas accedieron a la petición que les hacía la hermana Gloria y se la llevaron a ella, dejando a la religiosa más joven. Desde el momento del secuestro las autoridades colombianas han recibido tres pruebas de vida, saben que Gloria no ha sido asesinada y siguen buscándola. El Brigadier General Fernando Murillo dirige el departamento antisecuestros es el responsable de esta investigación.

El llamado secuestro virtual es uno de los delitos que más está creciendo en nuestro país en los últimos tiempos. El número de teléfono se elige por casualidad entre las decenas o centenas de llamadas que pueden efectuar para ver quién ''pica''.