Los ucranianos esperan un milagro de Navidad tras tres años de invasión rusa: "El fin de la guerra"

Tetiana es profesora en la Universidad Nacional de Odesa y pese a ser realista "no lo veo todo negro" ha dicho en 'La Linterna'

Europa Press 

Decenas de ucranianos en la estación central de Kiev

Redacción La Linterna Redacción digital

Publicado el

5 min lectura

      
      
             
      

Estamos en unas fechas que corresponden a tiempos de paz y que deberían servir para reflexionar y celebrar la unión entre todos. Unos días que tendrían que iluminarse con las luces de los árboles de Navidad y que deberían estar acompañados de villancicos sonando desde todos los lugares del mundo.

Debería ser lo normal estos días. Sin embargo, en algunos puntos del mundo marcados por conflictos, guerras y crisis, esa promesa de tranquilidad se desvanece. 

En Kiev, esta Navidad se escuchan los villancicos cantados por miles de ucranianos en el metro mientras se resguardan de los muchos ataques que la ciudad ha recibido en los últimos días.

Tan solo este jueves, Rusia ha lanzado al menos 31 drones de largo alcance contra varias regiones del país. Uno de ellos ha dejado hasta seis civiles heridos en ciudad de Nikopol. También el día de Navidad, desde Moscú dirigieron un ataque masivo contra la infraestructura energética ucraniana con el objetivo de dejar el país a oscuras en plena Navidad.

 La actividad sigue intensificándose al este del país donde las fuerzas rusas están intentando irrumpir a través de las defensas de la ciudad ucraniana de Pokrovsk. 

Y hay que añadir el último capítulo que tiene que ver con el avión de la compañía Azerbaijan Airlines que se estrelló en la ciudad de Aktau, en Kazajistán. Según el Gobierno azerbaiyano el siniestro que causó la muerte de 38 personas fue alcanzado por un misil antiaéreo ruso. Una teoría que también confirman desde Kiev. 

      
             
      

A punto de cumplirse tres años de la invasión rusa

La situación sigue siendo muy tensa cuando estamos a punto de cumplir tres años de conflicto.

El tiempo pasa muy deprisa y el conflicto en Ucrania continúa dejando miles de muertos. Según el Wall Street Journal en lo que llevamos de guerra habrían muerto cerca de 280.000 combatientes, 200 mil rusos y 80 mil ucranianos. Además, desde el 24 de febrero de 2022 cerca de 800.000 han resultado heridos. Ahora los ucranianos afrontan su tercera Navidad desde el inicio de la invasión rusa en medio de ataques contra zonas habitadas e infraestructuras energéticas.

El último ataque masivo ruso contra el sistema energético ha dejado a cientos de miles de residentes de Dnipro, Jarkov y otras ciudades ucranianas sin acceso a la electricidad y la calefacción en pleno invierno. Como si de un día cualquiera se tratara, este día de Navidad lo han afrontado con el sonido de las alarmas antiaéreas, mientras Rusia lanzaba aproximadamente 180 drones y misiles.

      
             
      

El presidente Volodímir Zelenski mandaba este mensaje a los ucranianos ante una Navidad que de nuevo va a ser bastante complicada. Algunos creen que Moscú eligió la fecha del ataque para castigar deliberadamente a los ucranianos por su decisión, tomada hace más de un año, de celebrar la Navidad el 25 de diciembre, cuando la mayor parte del mundo cristiano, en lugar del 7 de enero como Rusia.

"Esperamos un milagro: el fin de la guerra"

Pero a pesar de todo, los ucranianos han vuelto a mostrar que tienen más fuerza que nunca. Y es que después de que las alarmas cesaron, y que terminaron los sonidos de las bombas, las calles de muchas ciudades empezaron a llenarse de vecinos en camino a la Misa matutina y de niños disfrazados cantando villancicos.

Tetiana es profesora de la cátedra de Filología Hispana de la Universidad Nacional de Odesa y espera como el resto de ucranianos que termine esta pesadilla que comenzó hace tres años. Pese a las dificultades han intentado por todos los medios celebrar la Navidad.

      

"Las fiestas navideñas siempre es algo que nos recuerda a la niñez y, como todos los niños, da igual la edad, estamos esperando milagros. Y para nosotros ese milagro es el fin de la guerra", desea en La Linterna.

 ¿Hay alguna diferencia este año con los dos anteriores? "No mucha, porque, como pueden imaginar, cuando estás viviendo tanto tiempo dentro de esta guerra, de la tensión, de los ataques, de los problemas con el abastecimiento, con la energía eléctrica, siempre las fiestas ya saben un poco amargas. Y estas fiestas no son ninguna excepción, son amargas", le contesta Tetiana a Rubén Corral.

"La región de Odesa, donde yo vivo, ha sufrido muchísimos ataques y estos ataques se intensificaron en vísperas de las Navidades y, como ha dicho correctamente, el propósito es dejar a la población civil sin luz, sin agua, sin calefacción en invierno. Pero gracias al esfuerzo sobrehumano de las brigadas de mantenimiento, si hay cortes de luz es porque no consiguen reparar los daños en cuestión de horas, porque los daños son muy importantes. En el último ataque, la región de Odesa quedó sin luz durante tres días seguidos y para el invierno, con estas temperaturas bajas, es mucho", subraya esta profesora.

Da la sensación de que cada vez más ucranianos están celebrando la Navidad el 25 de diciembre, en lugar del 7 de enero, que es la fecha ortodoxa, ¿eso es una reacción contra la invasión de Ucrania por parte de Rusia? "Creo que sí. Deberíamos haberlo hecho muchos años antes, pero ahora, cuando esta guerra resulta tan larga y tan sangrienta, cualquier detalle que nos humille con Rusia nos duele más, y cada día más la gente quiere deshacerse de cualquier vínculo por pequeño que sea, que nos tenía unido a este país, que pensábamos que era país amigo". 

¿Y cómo ves el futuro? "Soy realista, así que no lo veo en colores de rosa, pero tampoco en colores negros, porque Ucrania no está sola, Ucrania está apoyada por la comunidad internacional, y gracias a este apoyo seguimos vivos, pero Rusia tampoco es un país débil, y también tiene sus aliados", concluye.