"Se nos llena la boca de fronteras, de gobiernos, de organismos internacionales y se nos olvidan los seres humanos"

Mira, oliendo la casquería de estos últimos días, me venía a la cabeza una reflexión. Oye, para ser feministas, y progresistas, y socialistas, y reformistas, no está mal el espectáculo. Claro, hoy leías, el informe de la UCO, menos mal que están ahí, sobre la FAFE y el enchufazo de ochenta y tantas personas en la Junta de Andalucía, entre ellas la mujer de Juan Espadas, actual portavoz del PSOE en el Senado. 

Y digo, coño, para ser tan feministas, los socialistas, enchufa a mi mujer en la FAFE, la del PowerPoint o la de, ¿te acuerdas, no?, la de la informática, el ordenador. Para ser feministas, Claudia, la de Gijón, o como le llamaban entre ellos los machotes "la loca de Asturias". Oye, resulta que no aparece quién modificó su currículum, como ella dijo, para que la contrataran. Qué casualidad. 

Oye, para feministas, Jessica, la sobrina del ministro, la de las fotitos del catálogo, a la que koldo dijo aquello de: ¿sabes leer y escribir? Pues contratada. Y tal cual la metieron en la empresa pública. Eso sí, junto a todas ellas nos hartamos de decir amigos y amigas, compañeros y compañeras, trabajadores y trabajadoras. ¡Qué feministas somos! 

Mira, vuelvo a la isla del hierro. Si lo soportas, yo no he querido, intenta volver a ver las imágenes. El Presidente de Canarias le ha dicho esta mañana a Herrera, aquí en COPE, que incluso la propia televisión canaria, que estaba allí en directo, editó las imágenes más atroces. Se veían los cuerpecitos de las niñas, la chica, las mujeres flotando. Mira, se nos llena la boca de fronteras, de límites, de los gobiernos, de los organismos internacionales y se nos olvidan las personas, los seres humanos. Se nos olvida la vida, la vidita de esas niñas de cinco años, ahogadas, muertas de miedo sin entender nada.

 Ayer, mi compañera Paloma me recordaba lo que nos dijo Macu, aquella doctora de urgencias en el hospital del hierro, cuando nos habló de la enfermedad del pie. Lo denominan así porque se tiran tantos días a la intemperie, entre basura, entre cuerpos quizás ya corrompiéndose, que se quedan sin poder articular ni siquiera las piernas, los pies, los tobillos. 

Caen al agua y no pueden ni aletear. Por eso muchos mueren ahogados. En fin, personaje del día también, el exsecretario de Estado de Seguridad en el último gobierno del PP, Francisco Martínez. Va para adelante, va para juicio. 

Yo me pregunto, ¿se puede caer más bajo? Habiendo sido secretario de Estado de Seguridad, que es el secretario de Estado más importante que existe, con diferencia, resulta que te pillan pocos años después con unos hackers que podían ser tus hijos, trapicheando con datos, con millones de datos, de identidades, de teléfonos, de vete tú a saber qué, para venderlos y llevarte una pasta. Qué cutre, ¿no?