"Terminamos el primer cumpleaños de la Constitución con la Ley de Amnistía en vigor, un misil contra la igualdad entre españoles"

El director de 'La Linterna' celebra el aniversario de la Constitución y se pregunta si, dado el panorama político de hoy en día, sería posible aprobar el texto

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Pregunta: ¿Hoy sería posible un pacto constitucional como aquel de hace 46 años? 

Hoy, 6 de diciembre, día de la Constitución, planteo otra pregunta: ¿Encontraríamos hoy siete padres y madres de la Constitución similares al menos a los de aquel 1978? En su día lo fueron Gregorio Peces Barba, Gabriel Cisneros, José Pedro Pérez- Llorca, Miguel Herrero y Rodríguez de Miñón, Manuel Fraga, Miquel Roca y Jordi Solé Tura.

Pero, ¿y hoy? ¿En este PSOE encontraríamos a alguien de aquella categoría? ¿Y en Bildu? ¿Desde Podemos a Vox, en sumar, en Junts, en Esquerra Republicana, en este PNV? Imagínate a Otegui, a Puigdemont, a Junqueras como padres de la Constitución.

A Ione Belarra, Superyoli y a puestos que la Mertxe Aizpurúa o el propio Carles, elaboren una reforma de la Constitución junto a gente de peso: María Jesús Montero, Óscar Puente, Gabriel Rufián, Pablo Iglesias y por el grupo mixto que se siente en la mesa de esos padres, José Luis Ábalos. Y a más a más que por Canarias se siente el Tito Berni. ¿Te acuerdas?

Bueno, yo propongo ya puestos que el Tito Berni y Ábalos se encarguen de redactar los artículos sobre Igualdad y Feminismo. ¿Te imaginas?

A vueltas con los socios, las ausencias. Hoy han pasado del 6 de diciembre de la Constitución, Junts, Esquerra, Bildu, el PNV. A medias, Vox, Podemos, Sumar. De hecho la vicepresidenta del Gobierno, Yolanda Díaz, se ha escaqueado y se ha ido a México a vender sus neuras a la feria del Libro de Guadalajara. ¿Qué habrán hecho los mexicanos?

      
             
      

En fin, terminamos el primer cumpleaños de la Constitución con la Ley de Amnistía en vigor, una ley aprobada el pasado mes de mayo, publicada en junio, una ley que supone, gracias a la sucursal de Ferraz en la sede del Tribunal Constitucional, un auténtico torpedo en la línea de flotación de la Carta Magna, una bomba contra la separación de poderes, un misil contra la igualdad entre españoles.

Terminando ya a este 6 de diciembre, 46 años ya con la Constitución, ¿hoy sería posible algo así? Seamos sinceros, tajantemente, no. Por cierto, no quiero cerrar este editorial sin mirar a Valencia, no les olvidemos, y recupero un tuit de Pedro Sánchez de esta mañana, comillas, “con el corazón en Valencia, hoy celebramos los 46 años de nuestra Constitución”.

Y digo yo, cuando dice “con el corazón en Valencia”, ¿sólo con el corazón? ¿Y el dinero? ¿Sabes por qué el presidente del Gobierno no está en Valencia no sólo con el corazón, sino con un par de valores? Porque por mucho bla bla bla, por mucho maquillaje y sobreactuación, sabe que no puede pisar la calle, ni el barro.

      
             
      

Así que menos corazón de boquilla y más cariño sincero. Ah, y mi postdata, la sorpresita del día. José Luis Ábalos ha pedido al Tribunal Supremo que aplace su declaración como investigado, fijada para el próximo jueves después de que el exministro se ofreciera para declarar voluntariamente.

La fecha la fijó el magistrado Leopoldo Puente. Estamos pendientes de Víctor Aldama para el día 16, Koldo para el día 17. Cabe recordar que el Supremo imputa a Ábalos por delitos de pertenencia a organización criminal, cohecho, tráfico de influencias y malversación. En lo personal no entramos.

El bueno de Ábalos pidió comparecer voluntariamente, pero ahora pide aplazar la cita porque no ha tenido tiempo de preparársela. ¿Te acuerdas? Es que me encanta. Pobrecillo. Tiene tanto trabajo como diputado del Grupo Mixto que no ha podido preparar sus respuestas a Aldama ni supongo buscar las escrituras del chalé de Soto Grande, el contrato del pisazo que le iban a adquirir en la Castellana o los recibos del alquiler de la Plaza de España para Jéssica. “No tengo a nadie”. ¡Qué pena me da!