Qué está pasando en el Mar Rojo: quiénes son los hutíes y cómo puede terminar afectándote al bolsillo

Expósito explora con economistas, expertos en la zona y en logística las rutas alternativas y qué hay tras los ataques a los barcos

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Escucha el análisis de qué está pasando en el Mar Rojo: los hutíes y el efecto en los precios

Paco Delgado

Madrid - Publicado el - Actualizado

7 min lectura

En los últimos días se están sucediendo los ataques de los rebeldes hutíes de Yemen a embarcaciones en el Mar Rojo. Una estrategia que se ha llevado a cabo como respuesta a la ofensiva israelí durante la guerra de Gaza. Enfrentamientos que han elevado la tensión en la zona y han conseguido amenazar una ruta estratégica de transporte vital para el funcionamiento de la economía mundial.

Todo mientras Estados Unidos ha desplegado su fuerza militar para proteger el comercio y acabar con el conflicto. Pero, ¿cómo es esta ruta? ¿Quiénes son los hutíes? ¿Cuáles son las consecuencias económicas de lo que está pasando?

Por qué el Mar Rojo es una zona clave

El estrecho de Bad al Mandeb se sitúa entre las costas de Eritrea y Yibuti, al este, en pleno cuerno de África, y la costa de Yemen, al oeste. Entre ambas costas hay una distancia de tan solo 30 kilómetros en su punto más angosto. Juan Corona es director de la Cátedra de Estudios Mundiales de la Universitat Abat Oliba CEU.

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“El Mar Rojo es una zona especialmente importante, ya que las rutas comerciales que pasan a través son la conexión más directa entre Europa y Asia, más del 10% del comercio marítimo mundial pasa por sus aguas”. Los países que tienen contacto con las aguas del mar Rojo son Israel, a Egipto, a Sudán, a Arabia Saudí, a Eritrea, a Yemen y a Yibuti. Un carajal de países que centran ahora el interés mundial.

“Irán es el gran aliado histórico de los hutíes, lo que explica la connivencia de Rusia y, en el otro lado, los países europeos y Estados Unidos”. Se trata de uno de los llamados "cuellos de botella" del tráfico marítimo. Su apertura es fundamental ya que cerca de un 80% de todo el comercio internacional de mercancías se lleva a cabo por mar.

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Su importancia está en que conecta el Índico con el mar Rojo que, a su vez, se une con el Mediterráneo, lo que le convierte en un punto fundamental en la conexión por mar entre Asia y Europa.

Quiénes son los hutíes

Los hutíes son un grupo político religioso chií (pro iraní), similar a Hezbolá y que tiene origen yemení. Desde hace casi 20 años se encuentran en una guerra constante contra el gobierno de Yemen y de Arabia Saudí, de mayoría suní. Actualmente, este grupo armado controla el noroeste del país, donde se encuentra la capital del país, Saná, y la porción de costa bañada por el Mar Rojo.

“Las milicias hutíes simpatizan con Hamás, tienen probablemente el mismo patrocinador, que es Irán y, por lo tanto, el origen se sitúa en este problema”, comenta Corona en La Linterna. En un principio, aseguraron que sólo atacarían los barcos destinados a Israel y empezaron teniendo como objetivo embarcaciones con la bandera israelí o propiedad de empresas de este país.

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Pero la amenaza para el comercio mundial es mayor porque también han atacado barcos con bandera de otros países. Desde la Unión Europea condenan de manera firme estos ataques al mismo tiempo que insisten en que ponen en peligro la navegación internacional y las vidas de los marineros. Peter Stano, es el portavoz del Servicio de Acción Exterior de la UE: “Es iuna violación inaceptable de la ley internacional, una amenaza para la seguridad, no sólo para esa zona”.

Mientras tanto, como respuesta a estos ataques, Estados Unidos ha anunciado ya la creación de una coalición internacional conocida como "Guardián de la Prosperidad" para proteger a las embarcaciones que naveguen por estas aguas. Durante estos días las armadas de diferentes países han conseguido derribar algunos drones y misiles hutíes. Con esta coalición liderada por Estados Unidos, se intentará defender el estrecho con el apoyo de Reino Unido, Bahréin, Canadá, Italia, Países Bajos, Noruega y Seychelles.

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España, que fue convocada para unirse a esta coalición, ha rechazado implicarse "unilateralmente" en el conflicto sin el beneplácito de la OTAN o la Unión Europea. Las próximas semanas serán claves para ver cómo se desarrolla el conflicto. “Hay que esperar con cierta cautela ver si militarmente la operación consigue neutralizar a los hutíes y, de no hacerlo, el conflicto escalaría y el impacto internacional sería preocupante”, añade Corona.

El Mar Rojo, una autopista de lujo

Quien sabe muy bien cómo es esta ruta que pasa por este escenario que a día de hoy es tan complicado es Victor Rubio, Capitán de la Marina Mercante y autor del libro “El maldito contenedor”. Concretamente, la ha recorrido seis veces y lleva siguiéndola toda su vida, como explica en COPE.

“Es una autopista de lujo, por la comodidad que aporta y el precio del peaje, está muy destinada a las cosas fabricadas, la mercancía que tiene valor. Los petroleros se van por el sur de África porque son mercancías más baratas. Pero es verdad que a nivel industrial es el cordón umbilical”. Precisamente, ese tipo de mercancías a las que se refiere Rubio es electrónica, motores, muebles, bicicletas, textiles caros... “Todo lo que se fabrica, se containeriza y pasa por ahí”.

Las consecuencias económicas en el Mar Rojo

Este bloqueo está obligando a los buques procedentes de Europa a rodear África para llegar a India o China, o bien a atravesar el océano Ártico, navegable solo en algunas épocas del año. Por este recorrido navegan una gran cantidad de exportaciones de petróleo y gas procedentes del Golfo Pérsico. No hay que olvidar que en esta zona se ubican algunos de los mayores productores de hidrocarburos del mundo como Arabia Saudí, primer exportador mundial de petróleo, y Catar que está entre los tres mayores exportadores de gas.

Lo que sí ha subido han sido las tarifas del flete marítimo, es decir, el coste que se abona por el transporte de mercancías. Se calcula que se ha incrementado entre un 30% y un 40%, lo que puede provocar que las navieras no puedan encontrar buques capaces de asumir la larga ruta que rodea África hasta Europa.

La práctica habitual es que los buques que navegan por zonas de alta peligrosidad tengan que notificarlo a sus aseguradoras y pagar una prima de riesgo. A principios de diciembre, la prima de riesgo que estaban pagando las navieras era de solo un 0,07% del valor de la embarcación. En los últimos días ha subido a un porcentaje que varía entre el 0,5% y el 0,7%.

“Podría llegar a provocar una subida del petróleo y el gas natural, pero lo que está produciendo de momento ya es subida de precios en el transporte y eso va a repercutir en los bienes que se están transportando, que se van a pagar más caros”, explica Emilio González, profesor de Economía Internacional en Comillas ICADE.

Algunas navieras importantes que operan en esa zona han anunciado el cese temporal de su actividad en este importante enclave, lo que podría provocar un aumento en el precio de los combustibles. Otro mercado al que afecta es al de bienes de consumo y materias primas. Las compañías mercantes que han desviado sus barcos suman aproximadamente la mitad del tráfico mundial de contenedores.

Las alternativas a la ruta del Mar Rojo

En estos últimos días la situación en la zona es dramática, como explica en La Linterna Ramón Boixados, profesor de la Escuela de Organización Industrial y del Centro Español de Logística. “Hasta ahora 13 barcos han sido atacados y se han lanzado más de 100 ataques. Este último fin de semana los barcos de guerra americanos han destruido 14 drones hutíes”.

Por eso, a la pregunta de hasta cuándo están preocupados, Boixados es contundente: “Es que 11 navieras no transitan ya por el Mar Rojo, a día de ayer 103 barcos han sido desligados de la ruta. Yo estaría preocupado”. Sobre las posibles rutas alternativas, el experto insiste en mirar muy al sur, algo que también tiene sus inconvenientes.

“La primera alternativa es bordear África, lo que es 12 días y 9.000 kilómetros más. En una cadena de suministro el producto tiene que pasar por una serie de proveedores, un operador logístico, la produción de productos finales... Si hay un problema en esa cadena va a producir un desbarajuste, subida de precios, un efecto látigo (sobreactuación de empresas)”, concluye.

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