Datchball, el nuevo deporte que triunfa entre los niños aragoneses

Un deporte novedoso que supone una alternativa a otros más clásicos

Redacción digital

Madrid - Publicado el - Actualizado

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Datchball, así se llama este nuevo juego que está causando furor, por el momento, en los colegios de Aragón. Un deporte novedoso que supone una alternativa a otros más clásicos y que se basa en el balón prisionero de toda la vida pero con unas reglas más específicas. Recientemente se ha creado la Federación Aragonesa de Datchball, lo que supone sobre todo el reconocimiento a un deporte que nació con la intención, y sigue teniéndola, de divertir a unos niños de un colegio de Brea de Aragón, en Zaragoza.

En 'La Mañana de Fin de Semana' hemos hablado con Roberto Navarro, su creador, que confiesa que fue la insistencia de un alumno suyo la que provocó sus inicios: “Me decía todos los días que había que probar un juego muy divertido que jugaba con su primo; al final le dije que sí y luego los niños no hacían nada más que pedir seguir jugando”.

Para Roberto, como profesor, su principal objetivo era que fuese educativo e integrador, así que fue moldeando las reglas para que todos los niños pudieran jugar: “Entre ellos tienen que valorarse y aprender a jugar en igualdad; juegan chicas y chicos obligatoriamente juntos o por ejemplo, un niño con Síndrome de Down tiene dos vidas u otro con movilidad reducida solo es eliminado si le dan en cierta parte del cuerpo; de esta manera con darle una oportunidad más para participar en el juego tienen un protagonismo y una capacidad de influir en la partida muy alta”.

Estas reglas permiten a chicos y chicas con más dificultad para relacionarse o menos habilidad en el deporte sentirse integrados: “Tengo una experiencia con un chico con Asperger muy buena. Se quedó contra otra chica, que tampoco era muy habilidosa, y ahí me di cuenta que cualquiera de los dos había ganado. Por primera vez se sintió valorado, reconocido y animado por toda la clase”.

También se valora el comportamiento en los banquillos y en la grada, dando puntos extra por deportividad. Además, al poderlo jugar niños y mayores, Roberto asegura que familias enteras están enganchados y quieren mejorar de cara a los campeonatos, lo que significa pasar más tiempo en familia.

Hoy en día Roberto es profesor en Utebo, donde llevó su deporte desde Brea de Aragón y ha llegado a ser uno de las principales actividades en los Juegos Escolares de Aragón. Este curso lo han jugado cerca de 1.000 niños. Define al Datchball con 4 palabras: convivencia, diversión, pasión y libertad. ¿Y qué nos gustaba más de pequeños que restregarnos por el suelo?

El siguiente paso: el campeonato de Europa de Dodgeball (el deporte “original”) en Newcastle. Hacia allí han partido Roberto y sus compañeros. En su primera participación no tienen las expectativas muy altas pero confiesan que con competir dignamente ya será una victoria.