Buenos días. Sigues en ‘La Mañana del Fin de Semana de COPE’. Hemos llegado a este 26 de febrero, el mes nos va pidiendo ya un cambio y ¿a que no hay nada mejor que madrugar en sábado?
La jornada se va a mantener hoy con nubes en toda la península, que van a dejar lluvias dispersas. En el sur pueden ir acompañados de barro. Serán chubascos ocasionales en su gran mayoría, pero muy bienvenidos porque prácticamente no ha llovido en todo lo que llevamos de año y los embalses pedían agua a gritos. En febrero solo ha llovido una quinta parte de lo habitual y hay muchos puntos que hasta ahora no habían visto la lluvia. Las temperaturas máximas suben y lo hacen de forma notable en el Cantábrico y el Alto Ebro.
GUERRA UCRANIA
La noche en Ucrania ha vuelto a ser de mucho pánico. A medida que el ataque se extiende, todo pasa por el asedio y la toma de Kiev, que es uno de los grandes objetivos de Putin. En los últimos minutos se han escuchado disparos en los calles en un combate que se convierte en urbano.
Y por segunda noche consecutiva, miles de ucranianos han dormido -o lo han intentado- refugiados en sótanos, en el metro o en refugios antiaéreos. En un aparcamiento subterráneo está ahora mismo Olexandra. Ella vive en Kiev y cada vez que escucha una de las sirenas antiaéreas vuelve al parking. Sirena antiaérea que ha vuelto a sonar en los últimos minutos. Es la señal de alerta para que la población se refugie y se ponga a salvo por los bombardeos. Olexandra confirmaba a COPE que los militares rusos están ya en la capital de Ucrania.
Es imposible ahora mismo señalar una cifra exacta de los ucranianos que han abandonado ya el país. La ONU calcula que han salido más de 50.000, aunque algunas fuentes hablan ya de 100.000. Las previsiones más optimistas prevén que saldrán medio millón de ucranianos. Las más pesimistas, elevan esa cifra a los 5 millones.
Te venimos contando que el Gobierno de Kiev ha prohibido la salida del país a los hombres de 18 a 60 años. Se ha decretado la ley marcial y es una de sus consecuencias. ¿Por cuánto tiempo no van a poder abandonar el país los hombres en esa franja de edad, de 18 a 60 años? Hablan de una decisión temporal pero no precisan. Y dentro de esta prohibición, una de esas escenas es la de un padre despidiéndose de su hija pequeña. La niña tendrá tres o cuatro años. También está la madre. Las dos abandonan Ucrania pero el padre se tiene que quedar. Los tres rompen a llorar y este es el momento.
Kiev ahora mismo es una ciudad muy peligrosa porque el asedio está en marcha. La capital es uno de los grandes objetivos de Putin y los ciudadanos han visto como se han ido acercando poco a poco los militares. Los tanques están ya en la capital.
¿Hacia dónde se dirigen? Hacia el punto en el que creen que se encuentra el presidente ucraniano Valodímir Zelenski.Es la última aparición pública de Zelensky que ha salido para negar que haya ordenado a su ejército deponer las armas. Estoy aquí y no depondremos las armas. Defenderemos nuestro estado, decía Zelensky.
La capital está completamente rodeada y se prevé que caiga en manos rusas no en días, sino en horas. Un misil de crucero acaba de golpear un edificio de gran altura en las inmediaciones del aeropuerto de Kiev. Además, es noticia también de última hora, el ministerio de Defensa ruso asegura que la flota naval rusa ha destruido 8 barcos navales ucranianos.
Para abandonar el país no hay otra forma que hacerlo por tierra porque el tráfico aéreo está cerrado. Durante las últimas horas, las estaciones de trenes de Kiev han estado abarrotadas. Y las líneas de autobuses desbordadas. En uno de esos autobuses conseguía abonar Ucrania el actor español Santiago Alverú. Contaba a COPE su aventura para poder salir.
Ahora hablamos de las sanciones y de lo que le preocupa eso a Vladimir Putin. La situación es clara: un invasor sin casi oposición en su camino y un invadido que está solo y lo viene denunciando el presidente ucraniano. Occidente ha mandado armamento a Ucrania, eso es verdad, pero la superioridad del ejército ruso es abrumadora.
Y lo han planificado muy bien hasta terminar acorralando a sus vecinos a pesar de que toda la comunidad estaba perfectamente avisada. A Putin se le puede achacar lo que sea, pero no que haya ocultado nunca sus intenciones.
Por eso, lo que nos seguimos preguntando es por qué no se ha puesto freno a la afrenta. Por qué no se ha plantado cara a Putin.
Pues hay varios factores. Pero a nadie se le escapa que Occidente, tras el repunte económico tras la pandemia, vive una crisis energética. Y gran parte de Europa depende del gas y del petróleo rusos. Dependemos de un tirano como es Putin.
No convenía molestar mucho a Rusia no fuera a cortar el grifo. Confiaban en que fuera de farol y se han equivocado. Ahora, la Unión ha aprobado sanciones que pasan, fundamentalmente por bloqueos económicos. Ahogar económicamente a Rusia.
También ha impuesto sanciones directas al presidente ruso y a su ministro de exteriores Lavrov. Se congelan sus bienes en Europa pero no se les impide la entrada a los países de la Unión. Sanciones que adelantaba aquí, en 'Herrera en COPE', José Manuel Albares.
Rusia no se inmuta. Todo lo contrario, mantiene el desafío. Lo último ha sido amenazar a Finlandia y a Suecia con “graves repercusiones militares y políticas” si ingresan en la OTAN. También piden al ejército ucraniano que se ponga de su parte y que castigue a un gobierno al que el propio Putin tildaba de neonazis y drogadictos.
Esto el presidente ruso. Al que no le para nadie. Y en el lado más débil Ucrania y los ucranianos. Son los grandes damnificados de esta invasión. Todos se han movido por sus propios intereses y ellos se han quedado solos. Putin va a por el presidente Zelensky. No permite que se acerque a occidente y quiere colocar un Gobierno dócil que lo pueda manejar.
Un Gobierno que permita expandirse con impunidad. Y Zelensky se ha mostrado firme frente a Putin pero consciente de su inferioridad militar.
Pues este Valodimir Zelensky, el presidente ucraniano es el objetivo número 1 de Rusia. Pero denuncia que occidente le ha dejado solo. En las últimas horas ha publicado un vídeo desde las calles de Kiev en el que dice que siguen todos ahí y que prometen defender el país.
De momento, la OTAN ha preparado fuerzas de respuesta rápida. El objetivo es defender a los aliados del este que más se pueden ver afectados. Polonia y Rumanía, fundamentalmente. Se trata de un contingente de 40.000 efectivos para desplegarse en cualquier escenario en menos de 5 días.
Putin no teme a nada ni a nadie, ya verán por dónde se pasa las sanciones. Pero en las últimas horas todos nos hemos venido haciendo eco de una decisión del festival de Eurovisión, que ha anunciado la expulsión de Rusia del certamen de este año que se celebra en Turín del 10 al 14 de mayo. Vamos que en el Kremlin se han puesto a llorar por las esquinas.
Consecuencias económicas inmediatas. El viernes, tras conocerse la invasión, el precio del petróleo se disparó por encima de los 100 dólares el barril. Ayer, el crudo del mar del Norte, de referencia en Europa, cotizó a 98 dólares, algo menos que el día anterior. Aún así, los carburantes, el precio por llenar tu depósito sigue una escalada sin límite a la vista. Otra semana más hemos superado un récord y ya hemos perdido la cuenta.
El gasóleo supera el euro y medio el litro, la gasolina 95, un euro con 62 céntimos y la gasolina 98, atentos se aproxima de media a un euro con 80 céntimos.
Y luego la luz, que ha tampoco da tregua. En eso que llamamos mercado mayorista, el precio del gas es un factor fundamental y con lo que está pasando en Rusia ha subido y está repercutiendo ya en lo que se va a pagar este sábado. La luz marcará hoy su precio más alto del año, con 261,11 euros el megawatio hora. En la hora más cara, entre las siete y las ocho de la tarde, estará por encima de los 300 euros el megawatio hora.
Estamos en el segundo sábado con el precio de la luz más caro de la historia, y solo si lo comparamos con hace siete días, un 90% más.
Uno de los sectores más perjudicados por el precio de la energía es la agricultura. Las gentes del campo se volvieron ayer a echar a la calle.
Tractoradas en Valladolid, en Valencia, en Sevilla. Salvador Cardona tiene una plantación de Kakis en Valencia. Y las cuentas no le salen.
Pues la guerra en Ucrania no va a hacer más que agravar los costes. Eso lo están comprando ya y no ha hecho más que empezar la invasión.