EN 'LA NOCHE DE ADOLFO ARJONA'
Las devastadoras consecuencias de la desaparición de las abejas: aumento de CO2 y falta de alimentos
Un experto explica a Adolfo Arjona los efectos negativos que la desaparición de las abejas tendrían sobre el planeta y los seres vivos
Málaga - Publicado el - Actualizado
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De las abejas sabemos que pueden vivir hasta 3 años. Aunque si nos clavan su aguijón, firman su condena de muerte y fallecen a los pocos minutos. También sabemos que son extremadamente sociables. Que podemos encontrarlas aquí y al otro lado del Atlántico porque viven en todos los continentes de la Tierra. Bueno, en todos menos en la Antártida. Sabemos que llevan habitando el planeta mucho más tiempo que nosotros: más de 30 millones de años. Además, trabajan con la jerarquía de un ejército y su alimento es el néctar de las flores. Hasta conocemos su tamaño: miden un centímetro y medio aproximadamente. Pero hay algo que no conocemos. ¿Qué pasaría si estos insectos desaparecieran? Algunos biólogos afirman que “sin abejas no habría vida”. ¿Es cierto? ¿Tan trágicas serían las consecuencias de su desaparición?
Todas estas cuestiones las trasladamos a Jesús Llorente, que lleva toda su vida estudiando estos insectos polinizadores y es el portavoz de la Fundación “Amigos de las Abejas”. Llorente le cuenta a Adolfo Arjona que es lo que podría pasar si estos insectos desaparecieran de la faz de la tierra. En este sentido, el experto es contundente: “Lo pasaríamos francamente mal. Todos sabemos que las abejas y otros insectos polinizadores y otros insectos son los responsables de gran parte de los que consumimos. Sin esa acción de la polinización, estas plantas no producirían frutos”, asegura.
ADIÓS A ALGUNOS ALIMENTOS
Si las abejas desaparecieran, nos olvidaríamos de un grandísimo número de frutos como es el caso de almendras, aguacates, arándanos, calabazas, cerezas, ciruelas, fresas, manzanas, melones y moras, entre otros muchos. Pero el experto asegura que no solo sería un problema para el ser humano ya que los animales también experimentarían una merma en su alimentación “la cadena trófica de los animales también sufriría. Faltaría alfalfa y trébol. Habría menos forraje y por lo tanto disminuiría el número de animales, así que los frutos de estos animales también nos faltarían”.
Está claro que el efecto de la desaparición de las abejas sería devastador “aunque hay plantas que pueden ser polinizadas por el viento o el agua, las que nos interesan a nosotros son las que nos proporcionan los alimentos ya mencionados”.
El científico Albert Einstein llegó a afirmar que si las abejas se extinguieran, la vida en el planeta tardaría solo cuatro años en desaparecer. El experto comparte esta afirmación: “La vegetación se vería drásticamente disminuida y las plantas consumen durante el día el CO2. Al no existir, subirían los niveles de dióxido de carbono y se agravaría el cambio climático”. Ante un panorama en el que faltarían alimentos y subirían de manera notable los niveles de CO2, es inevitable la preocupación
DESCENSO
¿Las abejas podrían desaparecer a corto medio plazo? Lo cierto es que pese a que ese riesgo es real, Llorente cree que existen otros problemas como el cambio climático, el uso de fitosanitarios por parte de los agricultores, las enfermedades que sufren las abejas. En ese punto soy optimista. Sí es verdad que a nivel mundial, los polinizadores están en declive y en España hay un importante descenso. La pregunta es qué podemos hacer para intentar frenar el descenso de la población de abejas. Sobre este asunto, el experto asegura que lo mejor es consumir el producto que ellas consumen como son la miel, el polen y los propóleos “y si puede ser a nuestros apicultores cercanos para, además ayudarlos", termina Llorente.