LA NOCHE DE ADOLFO ARJONA

Virus manipulados para curar el cáncer: “Una terapia a la carta”

En “La Noche de Adolfo Arjona”, hablamos de virus y bacterias que ayudan a sanar a nuestro cuerpo, como la vacuna experimental contra el cáncer de pulmón que se está probando en dos hospitales de Valencia

Yolanda Guirado

Sevilla - Publicado el

6 min lectura

      
      
             
      

Son pequeños seres diminutos. Tan diminutos que algunos no pueden verse ni siquiera con un microscopio. Son los virus y bacterias. Es cierto que muchos pueden ser letales, como el virus del Coronavirus o el virus de la gripe española, que dejó unos 50 millones de muertos en todo el planeta en 1918. Pero también hay virus buenos, que podrían ayudarnos incluso a curar enfermedades, como el cáncer

Uno de los virus más conocidos es el del resfriado. Dicen los expertos que a lo largo de nuestra vida, podemos pasar un año en cama por un resfriado. Es un virus tan antiguo que aparece en el primer tratado médico de la historia, el llamado papiro Ebers, escrito en Egipto hace 3.500 años. Pero hay muchos más.

esos diminutos también son amigos

Vamos a descubrir cómo son y cómo se comportan en el monográfico “Virus y bacterias: Esos diminutos amigos y enemigos”.  Adolfo Arjona ha hablado con José Penadés, un referente en Europa sobre este asunto, que nos ha acercado a esos millones de microorganismos que habitan en nuestro cuerpo y se extienden por todo el planeta.

Los virus y bacterias son necesarios para la vida en el planeta

Según el catedrático de Microbiología en el Centro de Biología de la Resistencia Bacteriana en el Imperial College de Londres y en la Universidad CEU Cardenal Herrera, los virus y bacterias tienen un papel clave en la Medicina. “Para que una persona esté sana, debe tener bacterias y virus, porque nos protegen, nos dan nutrientes y ocupan un nicho que, al estar ocupado por ellas, impide que otras que pueden producir una enfermedad, lo ocupen”.

las "superbacterias"

Hay unas bacterias conocidas como “las superbacterias”, que son resistentes a los antibióticos. Según Naciones Unidas, este problema, que provoca que los antibióticos sean cada vez menos eficaces para atajar infecciones, podría llegar a causar diez millones de muertes al año en 2050 y convertirse en la primera causa de muerte en el mundo.

Los microorganismos pueden convertirse en grandes aliados del ser humano

José Penadés

Catedrático de Microbiología en el Imperial College de Londres

José Penadés nos cuenta en "La Noche de Adolfo Arjona", que “cuando estas bacterias se hacen resistentes, aparecen los problemas para erradicarlas. ” Y esto reconoce que se convierte en un problema, porque en estos casos, la salud del paciente puede incluso correr peligro, ya que esa medicación, no es suficiente para acabar con ellas.

      
             
      

un tratamiento contra el cáncer

La investigación con virus y bacterias no cesa. En estos momentos, la viroterapia sigue avanzando. Se trata de un tratamiento en el que se usa un virus alterado en el laboratorio para encontrar y destruir células cancerosas sin dañar las células sanas. Según los expertos, estos virus se reproducen en las células cancerígenas, pero no en las sanas, con lo cual, este tratamiento no es tan tóxico como las terapias clásicas contra el cáncer.

Muchas investigaciones se centran en vacunas contra algunos tipos de cáncer a base de virus que atacan a las células cancerosas. De hecho, ya hay una vacuna experimental contra el cáncer de pulmón que se está probando en dos hospitales de Valencia (en el hospital La Fe de Valencia y en el hospital de Castellón).

Pacientes de dos hospitales valencianos reciben ya la vacuna experimental contra el cáncer de pulmón

Como ha contado José Penadés a Adolfo Arjona, estos tratamientos pueden resultar muy efectivos contra el cáncer en el que se utilizan anticuerpos. “Porque los virus usan receptores específicos para inyectar su material genético. En la medida en que fuéramos capaces de diseñar virus, podríamos generar un tratamiento modificando esos virus.”

      
             
      

una terapia "efectiva"

Otra enfermedad sobre la que se investiga: el retinoblastoma, un tipo de cáncer ocular que afecta principalmente a niños. Puede causar ceguera y, si el paciente no responde al tratamiento, hay que extirpar los ojos para que no se extienda a todo el cuerpo. Ahora, un virus modificado genéticamente se ha utilizado con éxito para el tratamiento de esta enfermedad.

Estos virus "buenos" atacan y eliminan a las células cancerígenas sin afectar a las sanas. Hasta tal punto podemos manipular los virus para que nos sanen. “Es un poco la misma idea de la inmunoterapia pero con el tratamiento del cáncer. Los virus pueden reconocer proteínas que están en la superficie de las células que van a infectar. Si conseguimos generar virus que reconozcan proteínas en la superficie solo de las células cancerosas, sería una terapia muy efectiva y muy dirigida.”

La viroterapia consigue que los virus eliminen las células cancerígenas sin afectar a las sanas

Dicen los científicos que si colocáramos en una balanza todas las bacterias que hay en nuestro organismo, no pesarían más de un kilo y medio. A pesar de su diminuto tamaño, son tan poderosas que pueden incluso alterar nuestro estado de ánimo.

      

"ES LA MICROBIOTA, IDIOTA"

Están en la pantalla del ordenador que estás leyendo, en el móvil que llevas en el bolsillo, en las manos, y hasta en la boca. Incluso hay unos “bichitos” que se encuentran en el aparato digestivo: Es lo que conocemos como microbiota. Para saber cómo se comporta, hablamos con Sari Arponen es doctora en Medicina, experta en microbiota y autora del libro autora del libro “¡Es la microbiota, idiota! Descubre cómo tu salud depende de los billones de microorganismos que habitan en tu cuerpo”, que publica la editorial Alienta.

Podemos (y debemos) cuidar nuestra microbiota

Sari Arponen

Doctora en Medicina

Hay teorías que apuntan que la microbiota se empieza a desarrollar en el vientre materno y queda formada prácticamente al 100% cuando cumplimos dos años de vida. Pero Sari Arponen apunta: “es algo que se ha debatido a lo largo de mucho tiempo. Hay mucha evidencia científica que dice que la microbiota se crea a partir del nacimiento.” A lo largo de nuestra vida, esta microbiota se va modificando dependiendo de nuestra alimentación y de nuestros hábitos de vida.

Una alimentación saludable protege a los microorganismos del intestino

Además, la microbiota de dos personas que viven juntas, toman la misma alimentación y comparten hábitos es muy parecida. “Mucho más que la microbiota de un hijo y una madre que ya no conviven juntos. La microbiota de la boca es muy parecida entre parejas porque comparten una intimidad”.

Hay quienes afirman que cada microbiota es tan específica como una huella digital. “Es verdad que cada uno tiene su propia microbiota, pero llegar a identificar a una persona por su microbiota sería complicado". Además, la microbiota varía mucho. “La microbiota que tengo en este momento puede cambiar en dos días por el siempre hecho de haber viajado a otro país.” Sin embargo, la huella dactilar no cambia nunca.

somos lo que comemos (y nuestros virus también)

La microbiota intestinal depende mucho de lo que comemos, de qué tipo de alimentos comemos, en qué cantidades. “Todo esto tiene un impacto muy importante en la microbiota. Si los cambios en la alimentación persisten en el tiempo, los cambios en la microbiota pueden ser persistentes en el tiempo”.

Estamos hablando de una parte muy importante de nuestro cuerpo. La buena noticia es que podemos cuidarla y sanarla. “La microbiota se puede cuidar de la misma forma que nos cuidamos a nosotros mismos”.

Una buena higiene bucodental nos ayuda a cuidar la microbiota

Y según la doctora, resulta muy fácil: “Una alimentación mediterránea, alimentos de proximidad y temporada. Esto es clave, al igual que la higiene oral. Es importante que vayamos al dentista y nos lavemos los dientes. Porque la microbiota oral marca la intestinal”.

cuando algo va mal

Pasar tiempo en la naturaleza también ayuda a tener una microbiota más saludable: “Nos ayuda a controlar a los microorganismos patógenos, los que producen infecciones, y cuando estamos en el bosque entramos en contacto con virus que pueden ayudarnos a modificar nuestra microbiota”.

Pero, ¿Cuándo sabemos que nuestra microbiota no marcha bien? Hay algunas pistas que debemos tener en cuenta, como el sangrado de encías, las caries, o la halitosis. También puede haber problemas en la microbiota cuando hay problemas en la digestión.