India, el país maldito para nacer mujer
Desde el mismo día en el que nace una niña en la India su familia comienza a ahorrar para pagar la dote al hombre con el que se case
Madrid - Publicado el - Actualizado
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Cuanto más joven sea la novia, menor será la dote. De ahí que, con frecuencia los padres, entreguen a sus hijas siendo aún menores de edad. Algo ilegal, pero que realmente ni se juzga ni se condena. Esto explica que 4 de cada 10 matrimonios infantiles que se producen en el mundo, se registren en la India.
“India es, actualmente, uno de los peores países para nacer mujer”, apuntillaba Jaume Sanllorente, un barcelonés de 42, que dejó España y su carrera de periodista, para fundar la oenegé ‘Sonrisas de Bombay’. Además, ahora ha publicado su libro ‘Mujeres de Bombay’.
En este país, tener una hija es casi “una maldición pues supone que la familia debe dejarla ir con sus suegros para que les sirva. Es por eso que, en muchas ocasiones, se producen abortos antes de que nazcan las niñas”, explicaba Sanllorente.
Un tema que Juame Sanllorente trata en su libro, contando casos en los que los padres venden a las niñas, o madres que han llegado a enterrar vivas a sus hijas al nacer al considerarlo una maldición.
“La clase media en India no está muy abierta al mundo. Las quejas sobre estos casos con niñas se quedan en la élite, no llegan al grueso de la población”, desarrollaba Jaume Sanllorente en su conversación con Adolfo Arjona en La Noche de COPE.
Puede resultar difícil de creer que esto ocurra en uno de los países con mayor proyección económica, pero no es lo único que ocurre en India, porque como explicaba Jaume Sanllorente, “India es un país donde se produce una violación cada 20 minutos”.
Aun así, Sanllorente siente mucho aprecio por este país porque, según dice, “se siente una energía diferente, y también hay muchas cosas buenas”.
Este barcelonés ha sabido adaptarse a la vida en India gracias al respeto a la lengua, “no creyéndose superior” y rodeándose de gente local. Así, Jaume Sanllorente lleva con su oenegé ‘Sonrisas de Bombay’, ni más ni menos, que 13 años.