¿Por qué triunfaron las telenovelas latinas en España?
¿Quién no recuerda ‘Los ricos también lloran’, ‘Cristal’, ‘Topacio’, ‘Pasión de gavilanes’ o ‘Yo soy Betty, la fea’?
Madrid - Publicado el - Actualizado
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Si la semana pasada quisimos tratar algunas de las series que marcaron una generación, como ‘La Casa de la Pradera’, ‘Bonanza’, ‘Falcon Crest’, ‘El Equipo A’ o ‘El coche fantástico’. Ahora queremos hacer memoria y recordar aquellas telenovelas sudamericanas que nos han marcado a todos… ¿Quién no recuerda ‘Los ricos también lloran’, ‘Cristal’, ‘Topacio’, ‘Pasión de gavilanes’ o ‘Yo soy Betty, la fea’?
Alberto Nahúm, profesor de Comunicación Audiovisual de la Universidad de Navarra y especialista en series de televisión, explicaba en La Noche de COPE que “se basaban en tramas repetidas centradas en amor, conflicto, dinero, herencias o envidias”. Asimismo, añadía que “los entornos deben ser estables y las emociones deben darse a flor de piel: traicionar a una madre, vender a un familiar… para que salgan bien y tengan éxito. Además, la historia debe estar abierta para que se mantenga muchos capítulos con un argumento circular”.
LOS RICOS TAMBIÉN LLORAN
Probablemente sea la telenovela mexicana más exitosa de la historia. Una serie que se estrenó en 1979, y que, durante sus 248 capítulos, enseñó a toda una generación que la felicidad de las personas no entiende de ceros en la cuenta bancaria. ‘Los ricos también lloran’ llegó a España el 13 de enero de 1986, y cautivó a miles de telespectadores.
El escritor venezolano y guionista de telenovelas, Alberto Barrera comentaba que “su éxito radicó en una combinación en la que sobresalía el casting, y que trataba una historia clásica: el sueño de una mujer que descubre a un príncipe azul y supera las adversidades”.
“Tuvo incluso más acogida en Europa que en Latinoamérica. En Rusia hay un día dedicado a su protagonista, Verónica Castro. Desde entonces, la cursilería latinoamericana, bien entendida, fue asentándose con las telenovelas en Europa”, explicaba Barrera.
TOPACIO
‘Topacio’ se llegó a emitir en 17 países. Estamos ante una novela venezolana, frente a la de ‘Los ricos también lloran’, que era mexicana. ¿En qué se parecían y diferenciaban?
“Eran parte de la misma escuela, venían de la fuente de la radionovela cubana. Había diferencias en las producciones y en el acento, pero eran un modelo de producto similar”, argumentaba Alberto Barrera.
“Lo que más gustó al público de esta telenovela fue que era muy muy romántica, dedicada a las mujeres que conseguían sus propósitos a pesar de las maldades. Eran heroínas sentimentales”, concluía el escritor venezolano.
CRISTAL
Nuestra siguiente telenovela nos lleva al 5 de agosto de 1985. Aquel día se emitía en un canal de televisión venezolano el primer capítulo de ‘Cristal’. Una telenovela que tenía entre su reparto a Carlos Mata, interpretando a Luis Alfredo Ascanio.
Al ser preguntado cómo eran los rodajes, Mata respondía en La Noche que “preparaba los diálogos la noche anterior para emitir al día siguiente. Un día llegué a grabar 26 escenas y, más de una vez, tenía que aprenderme los libretos en 2 minutos. La habilidad se desarrolla sobre la marcha. Esos fueron algunos de los momentos que recuerdo de una gran etapa de mi vida”.
YO SOY BETTY, LA FEA
Otro culebrón que sólo con oír su título ya atrajo a muchos espectadores fue ‘Yo soy Betty, la fea’. Para el crítico y analista de televisión colombiano, Omar Rincón, esta telenovela “tuvo éxito porque innovó poniendo a una mujer fea como protagonista, que también tiene tintes cómicos y cuyos personajes secundarios se reían de su fealdad siendo guapas”.
PASIÓN DE GAVILANES
En primer lugar, hay que aclarar que 'Pasión de Gavilanes' no es una idea original, es la adaptación de otra telenovela colombiana del mismo escritor: 'Las aguas mansas', de Julio Jiménez, y del año 1994.
Omar Rincón decía lo siguiente sobre esta producción: “Es un clásico, pero también introdujo varias modificaciones en lo que se estilaba entonces. Tiene 3 héroes con características distintas; uno honesto, otro emprendedor y otro atormentado. Esto triplicó el drama y cautivó al público”.