¿Eres una persona altamente sensible? Descúbrelo respondiendo a estas sencillas preguntas
La alta sensibilidad se descubrió en la década de los 90 por la psicóloga estadounidense Elaine Aron al estudiar la introversión
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¿Alguna vez has tenido la sensación de que la gente no te entiende o que quien te rodea es sumamente superficial? ¿Crees que vivimos en una sociedad deshumanizada y que no nos ponemos en lugar de los demás? Si has contestado a todas que sí, puede que seas una persona altamente sensible.
Cuando hablamos de sensibilidad, se nos vienen a la cabeza palabras como belleza, delicadeza, fragilidad, emociones o sutileza. Pero hoy vamos a descubrir cómo son las personas altamente sensibles, sus debilidades y hasta dónde llega esa sensibilidad.
Nuestro coach David Cicuéndez es quien arrojará un poco de luz a todo esto y nos ayuda a saber si formamos parte de ese 20% de la población. No olvidemos que el autoconocimiento es el inicio de nuestra autoaceptación y que este es el inicio de nuestro fluir en la vida.
La alta sensibilidad se descubrió en la década de los 90 por la psicóloga estadounidense Elaine Aron al estudiar la introversión. Es un rasgo de la personalidad, como pueden ser la amabilidad o responsabilidad, y es neutro, ni bueno ni malo. Lo importante es cómo lo gestionamos. Hay más conexiones neuronales y se procesa la información de una forma diferente al resto de la población.
No es patología o disfuncionalidad o enfermedad y lo tienen el 20% de la población. Es hereditario. Si uno de los padres lo tiene, el hijo puede tenerlo o tener una mezcla. Si ambos padres lo tienen, el hijo lo tendrá seguro y a veces hay un salto generacional y pasa de abuelos a nietos. Se les puede confundir por maniáticos, susceptibles, deprimidos o bipolares.
¿Qué características tienen las personas altamente sensibles?
Las PAS tienen que tener las 4 características o pilares sí o sí. Procesamiento profundo de la información: mayor información recibida, mayor análisis y reflexión. Se percibe más información. Se suele estar rumiando todo el día o pensando todo el día. Se necesita más tiempo para tomar decisiones. No es que les cueste tomar decisiones, sino que necesitan más tiempo y van a otro ritmo. Son personas muy reflexivas y no impulsivas. Suelen ser introvertidas en un 80%. Este exceso de pensamiento genera una dificultad para gestionar las cosas.
Sobre estimulación sensorial: Reciben más estímulos sensoriales. Detectan antes que nadie un olor o cambio de temperatura. Molestan los ruidos, El agobio implica que han llegado al límite de su percepción sensorial. No es que sufran agorafobia, sino que se agobian por la sobre estimulación. Se pueden llevar a bloquear con esa sobre estimulación y buscarán la calma y el silencio y la soledad.
Empatía muy desarrollada y extremos emocionales: Los problemas de los demás los interiorizan como suyos. Llevan en sus mochilas los problemas de los demás. Viven en los extremos de las emociones como alegría o tristeza. Hay mucha intensidad emocional.
Captación del mundo sutil a través de los sentidos: Ven ese cuadro girado, esos instrumentos ocultos en una canción o esos ingredientes camuflados en un plato o son los primeros en detectar un cambio de temperatura u olor.
¿Cuáles son las necesidades o áreas de mejora que tienen estas personas?
La empatía les hace ser personas muy susceptibles y tienen problemas de autoestima e inseguridad. Comentarios sin intención de otros los perciben como hirientes. Su alta empatía creen que es normal y no saben que el resto de personas no tienen tanta empatía o la tienen equilibrada.