Un catedrático de Derecho Penal revela cómo Rubiales podría ser investigado por agresión sexual

Emilio Cortés valora que las "contradicciones" del presidente de la RFEF en sus diferentes comparecencias no le beneficiarían en un proceso penal

Redacción digital

Madrid - Publicado el - Actualizado

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Esta mañana, a las 12 del mediodía, todos estábamos expectantes ante el discurso de Rubiales. Desde que el presidente de la RFEF ha desvelado que no piensa dimitir, todas las jugadoras, una por una, han levantado la voz.

Encabezadas por un tweet de Alexia Putellas, han demostrado su colaboración y apoyo a Jenni Hermoso, repudiando las palabras de Rubiales y asqueadas por los que las aplaudían.

Parece que va a quedar inhabilitado, es hasta donde puede llegar el Consejo Superior de Deportes (CSD). Los miembros de la Asamblea podrían haber votado para echarlo, pero han preferido apoyarlo.

Las dos vías para que Rubiales abandone su cargo

El catedrático de Derecho Penal de la Universidad de Extremadura, Emilio Cortés, ha tratado de explicar qué puede pasar con Rubiales a partir de ahora. Cortés ha comenzado planteando las dos vertientes que tiene el caso, siendo el primero de ellos el Administrativo. "La acumulación de denuncias presentadas al CSD" pasarán por "su brazo jurídico", el Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAD).

El catedrático revela que la sanción podrá ser, "como mucho", económica y la inhabilitación de sus funciones como presidente de la RFEF.

Después, ha desgranado el segundo plano del asunto, el penal. "Puede ser condenado por un delito de agresión sexual", afirma. Ha recordado que el término 'abuso sexual', donde se enmarcaban conductas similares a esta, han desaparecido con la ley del 'Solo sí es sí'.

"Sujetar a una persona de la cabeza para que, sin su consentimiento, proyectarle un beso en la boca, según la jurisprudencia más reciente y según la regulación normativa del tema en nuestro país, puede integrar un delito de agresión sexual", recalca.

El significado de 'violencia'

Entrando más en profundidad, lo primero es que "no consta un consentimiento expreso, según parece" y ha habido violencia. Cortés insiste en el lugar en el que ha dado el beso, ya que es donde se producen los delitos contra la libertad sexual, según la jurisprudencia. Estas zonas son "los senos, los glúteos y la boca".

Igualmente, para que exista violencia, no es necesario "llevar aparejado un hematoma o un sangrado". Bastaría con "someter a la víctima con fuerza suficiente para conseguir el resultado que se propone". Además, en el resto de besos y abrazos que Rubiales da, se puede comprobar que no coge de la cabeza y los da según lo que está "normalizado socialmente".

El catedrático incide en que, si se abre un procedimiento penal, el presidente de la RFEF, en las diferentes comparecencias que ha tenido describiendo los hechos, "ha entrado en una serie de contradicciones que, en un futuro, no le van a beneficiar".

"O querella de la señora Hermoso o querella de la Fiscalía"

Si comenzasen los trámites de esta vía, se judicializara y la Audiencia Nacional lo investigase como una posible agresión sexual, se suspendería la tramitación de la primera vía.

Aunque los hechos se hayan producido en Australia y, teóricamente, deberían ser perseguidos allí por el "principio de territorialidad", Cortés explica que la Audiencia Nacional "sí tendría competencia en atención a la nacionalidad del autor y víctima". También lo tendría por la tipología del delito.

"Combinando las normas de Derecho Internacional con nuestro Código Penal, haría falta una querella solo de la propia perjudicada, o bien, una del Ministerio Fiscal", desvela. Ha concluido reiterando que esas son las vías válidas para iniciar un proceso penal en España, mientras que "una denuncia particular, de las compañeras o de sus padres, sería penalmente estéril".