¿Cómo se consiguió tomar la imagen del surfista brasileño Gabriel Medina flotando en el aire?

Tras conocer la imagen más espectacular en lo que va de Juegos Olímpicos. ¿Cómo fue tomada? En La Tarde, la historia de la foto del surfista brasileño Gabriel Medina flotando.

Redacción digital

Madrid - Publicado el - Actualizado

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En plena vorágine de los Juegos Olímpicos, las redes sociales se inundan de instantáneas que se hacen virales por su contenido o su calidad. Sin embargo, hay una imagen que ha captado la atención de todos: la espectacular fotografía tomada por Jerome Brouillet. Esta foto, ya considerada la más impresionante de lo que va de los Juegos, muestra al surfista brasileño Gabriel Medina en pleno vuelo, ejecutando un truco asombroso al salir de una ola perfecta. Vestido con una camiseta rosa y pantalones cortos azul oscuro con detalles en amarillo y verde, Medina destaca en un entorno de competición, con su expresión de concentración y determinación, mientras su tabla de surf, adornada con la bandera brasileña, se suspende en el aire en un mar de gotas de agua. El fondo nublado añade un contraste dramático, capturando un momento de destreza y control inigualables.

En La Tarde de COPE nos preguntamos como se llevan a cabo este tipo de fotografías tan espectaculares y quiénes son los responsables de tomarlas. Resulta que los encargados son los llamados fotógrafos de surf o subacuáticos y en España contamos con varios de los mejores del mundo. Uno de ellos es Pablo Martínez, fotógrafo especializado en surf con más de 20 años de objetivo en la retina y miembro de honor del club de los fotógrafos de surf más consagrados de España.

¿Cómo se consigue una foto así?

"A nosotros nos parece que hubo 30 fotos anteriores a esa que son mucho más relevantes. Porque es un tubazo lo que hizo Jerome Brouillet. Eso es el culmen de haberse hecho la ola más fantástica de la historia celebrándolo por todo lo alto, que sí que es relevante en ese sentido", asegura Pablo Martínez. Aún así, queda por aclarar que este tipo de imágenes se toman desde el agua flotando con una carcasa acuática (caja estanca donde se meten las cámaras dentro para que no entre el agua) o desde los propios barcos: "En este caso que nos ocupa, Brouillet me parece que estaba en el agua, porque el punto de vista de como se tomó la foto sí que parece estar hecha flotando desde el agua, en la parte de atrás de la ola", sentencia Martínez.