La familia de Alcalá de Guadaíra que sigue una tradición muy especial en torno a la leche: "Somos los únicos"
Hermanos Batato es la única empresa lechera de España que reparte su producto a domicilio, llegando a vender 15000 litros al día
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Repartir la leche de casa en casa, un proceso por el que el lechero de toda la vida dejaba 2 litros en las puertas de los domicilios que después consumirían las familias. Esta parece una acción sacada de las películas americanas, pero es una realidad que todavía se ve en Alcalá de Guadaíra (Sevilla). Allí el lechero sigue llamando a la puerta. Los hermanos Batato ordeñan las vacas de madrugada y acto seguido la reparten. Son lecheros desde siempre, y siguen con su explotación de vacas. Hablamos de la producción de leche de vaca en 'La Tarde'.
Antonio Batato es el director de la empresa, trabaja con sus hijos Alejandra y Antonio. Ha explicado que comienzan muy temprano, se levantan a las 2 de las mañana para comenzar a ordeñar una hora más tarde, tras esto deben pasteurizarla para luego envasarla y repartir. Llevan trabajando de este modo desde la fundación de la empresa, hace ya 60 años.
Antonio hijo ha afirmado que no lo ve como una profesión, sino más bien un orgullo. Él pertenece a la tercera generación de lecheros y ha comentado los cambios que han introducido en la empresa: "Mi abuelo y mi padre repartían en burro y ahora van con coches frigoríficos y llegan con la máxima frescura".
Antonio padre ha confirmado alguno de los cambios que hay entre la leche de sus vacas y las de la competencia: "Somos la única empresa que vende únicamente en domicilio, a la cara del cliente". Ha asegurado que ordeñan las vacas dos veces al día, una durante la mañana y otra por la tarde.
El proceso detrás de la leche más casera
La familia vende 15000 litros al día, un dato del que se encuentran muy orgullosos. Han explicado el proceso que conlleva desde sacar la leche hasta llegar al cliente: "Ordeñamos a primera hora de la mañana, esta llega a un tanque de enfriamiento, luego pasa a la sala de envasado y se pasteuriza, después se homogeneiza y se lleva a la envasadora para poder meterlas en las furgonetas y repartir".
Antonio ha comentado una curiosa anécdota en la que una madre le servía la leche de Hermanos Batato a su pequeña. Cuando por su mala cabeza se le agotaba esta leche, iba a al supermercado a por otro tipo de leche. Lo curioso está en que la niña rechazaba esta nueva leche, únicamente consumía la de Batato.