La globalización se tambalea: ¿Podría reconvertirse España en gran fabricante de aceite de girasol?

El economista Fernando Trías de Bes explica en La Tarde las posibilidades de que España produzca lo que hasta la guerra de Ucrania compraba

Paco Delgado

Madrid - Publicado el - Actualizado

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Antes de la invasión de Ucrania era normal que en casa hubiese pan con trigo ucraniano de sobra. Antes de la pandemia era normal que en el coche hubiera semi conductores de Taiwán. Y antes de todo eso había una guerra comercial entre China y EEUU y estos últimos tenían dificultad para adquirir productos de proveedores chinos. ¿A partir de ahora vamos a tener que pagar más caro todo lo que compramos?

Por los micrófonos de La Tarde ha pasado el economista Fernando Trías de Bes que, entre otras cosas, ha dado respuesta a la posibilidad remota de que España pueda reconvertirse de comprador a proveedor en algunas materias primas que importábamos antes de la guerra en Ucrania.

¿Se acaba la globalización tras la guerra de Ucrania?

La globalización es el proceso por el que, a medida que los países van a abriendo sus fronteras, se va produciendo un cambio general de ideas, estilos de vida, culturas o religiones, no sólo en términos económicos. El nivel de globalización antes de la pandemia era el más alto del mundo. El 90% de los juguetes vienen de Asia y el 85% de los botones son chinos, el grado de interdependencia es enorme.

No obstante, según el economista, tendría que pasar un evento del calibre de una Guerra Mundial para que el proceso se pare: “Cuando hubo la crisis de los semi conductores Europa reflexionó sobre que habían dejado de fabricar cosas pero tendríamos que asistir a una guerra mundial que lo parase todo para frenar la globalización”, comenta.

“Hay 2 motivos: La diferencia ahora es que el mundo se ha globalizado por las finanzas, y luego prestaciones y servicios, además de la digitalización del mundo, por lo que va a seguir latente”, explica.

¿Podría reconvertirse España en un gran proveedor?

La pregunta es clara y la respuesta de Trías de Bes aún más: “No tendría sentido replantear los cultivos, en materia energética aún, Europa ha decidido que no quiere estar dependiendo de Argelia o Rusia y ha declarado la nuclear energía limpia”, apunta. “Pero en lo demás lo veo complicado”. Según explica el economista en COPE, una fábrica de semi conductores puede tardar de 4 a 10 años, y llegar a tener las extensiones de cultivo para tener nuestro propio aceite de girasol tardaría más de 2 años. “De hecho algunos problemas que estaban imposibilitando su llegado ya se está solucionando”, insiste.

Así, subraya Trías de Bes que, si hay globalización, siempre hay alguien que produce más barato que tú. “Al final la frontera te protege, la globalización te expone a que haya otros actores que vendan más barato que tú y te fuerza a intentar ser más competitivo, rápido o flexible. Crea y destruye, pero a la larga el resultado del mercado internacional siempre es positivo porque lleva a la eficiencia de los recursos”.

Ahora, reconoce el experto que “a los productores de esos productos en esos país no les hace gracia porque les obliga a dedicarse a otra cosa, trabajar más barato o a ser más competitivo”.