La hermana Clara, desde Algemesí: "Cuando llevamos ayuda, familia por familia, hacemos tres preguntas"

La hermana Clara es de un pueblo vecino, es de Alzira, concretamente, y tiene la fuerza de la juventud, cubre su pelo con la pañoleta fallera y protege su rostro con una mascarilla. Lleva con Cáritas trabajando siete días en Algemesí, y explica en La Tarde que la solidaridad está siendo “muy brutal entre todos, el ayudarnos unos con otros”. 

La hermana llegó junto a su grupo al barrio del Raval cuando apenas había apoyo y hubo que organizarse prácticamente desde cero. Asegura que llegaron a la localidad valenciana “un poco sin saber” y, cuando empezaron a ayudar, “no había llegado ayuda de ningún tipo de afuera, ni voluntarios, muy pocos voluntarios desde el principio”.

“Quizás porque se desconocía que Algemesí estaba también lastimado. Cuando ya Algemesí empezó a tener cobertura y se empezó a pedir ayuda, es cuando la generosidad de la gente de los pueblos vecinos se volcaron”, aclara la joven a Pilar García Muñiz.

Limpieza en cuatro días en Algemesí

El grupo de la hermana Clara comenzaron a ayudar en una parroquia bastante céntrica del pueblo de Algemesí. “Mientras íbamos caminando a ayudar a algunas familias, nos dimos cuenta de otra necesidad, y ahí es donde iniciamos, hace cuatro días, en el barrio del Raval, donde hay una parroquia, San José Obrero”. Explica que, hace cuatro días, tenía de lodo más de un metro.

“Estaba el sacerdote solito junto con una familia intentando limpiar, porque desconocíamos que ahí se necesitaba ayuda”, señala en La Tarde. “Y de golpe, en estos cuatro días, ha sido posible acabar de limpiarla entera, con lo que supone limpiar una parroquia, y recibir cantidad, kilos y kilos y kilos de ayuda, y empezar desde hace cuatro días también, porque todo esto se fue haciendo al mismo tiempo, a repartirlo a la gente de la periferia de la ciudad”.

Siete días después de que llegaran, la hermana Clara asegura que ha recorrido Algemesí entera, están llegando las ayudas de miles de voluntarios. “La ciudad ahora está un poquito más limpia que hace ocho días, el Raval sigue sucio, sigue con barro, con lodo, y constantemente, minuto tras minuto, sin parar, cientos, miles de voluntarios están ayudando a quitar eso”.

Las tres preguntas tras la DANA

Sobre las necesidades más urgentes en el barrio del Raval en Algemesí, aclara la hermana que es “visitar familia por familia, ver las necesidades concretas”, algo que llevan ya haciendo tres días pero, reconoce, todavía les falta “tocar puertas”. “Las preguntas que hacemos es, ¿hay algún bebé? ¿hay algún adulto mayor? ¿hay alguien enfermo que requiera de ayuda urgente o de ayuda a la larga? Porque son las personas más vulnerables y las que necesitan de una ayuda, a lo mejor, más inmediata”, explica a Pilar García Muñiz.

Gracias a estas preguntas están trabajando conjuntamente, desde este jueves, con Cruz Roja, con personal especializado sanitario y con toda la gente de buena voluntad, “que pueda venir a colaborar para que ninguna familia pueda quedarse exenta de esta ayuda que necesita tanta gente”.